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El año es 2018.
El día del Juico Final ha pasado, y en el proceso ha dejado en ruinas a
la civilización moderna. Una armada de Terminators deambula por el
paisaje post-apocalíptico, matando o recolectando a los humanos que se
esconden en los desiertos y en los recovecos de las desoladas ciudades.
Sin embargo, algunos grupos de sobrevivientes han formado la
Resistencia, ocultándose en bunkers subterráneos y tomando por asalto a
la fuerza enemiga.
Los Terminators son controlados por la red de inteligencia artificial
Skynet, que se tornó auto consciente catorce años antes y que, en un
abrir y cerrar de ojos, se puso en contra de sus creadores,
desencadenando y esparciendo una terrible devastación nuclear a lo largo
de un mundo que sencillamente no se lo esperaba.
Sólo un hombre sabía que el Juicio Final estaba cerca. Un hombre, cuyo
destino personal ha estado siempre ligado con el destino general de la
humanidad: John Connor (Christian Bale).
Ahora el mundo se encuentra en el umbral de un futuro que Connor nos
venía anunciando desde siempre. Pero algo nuevo ha cimbrado la fe que
este hombre tenía en la posible victoria de la humanidad: la aparición
de Marcus Wright (Sam Worthington), un extraño proveniente del pasado
cuyo último recuerdo no es otra cosa que haber sido condenado a muerte
antes de despertar en este nuevo y extraño mundo.
Connor debe descubrir si Marcus es confiable. Pero mientras Skynet se
adapta a nuevas estrategias a fin de acabar de una vez y para siempre
con la Resistencia, Connor y Marcus deben encontrar algún punto en común
para oponerse al violento ataque, infiltrar Skynet y confrontar
directamente al enemigo.
The Halycon Company presenta una Producción de Mortiz Borman, en
asociación con Wonderland Sound and Vision, una cinta de MCG,
“Terminator – La Salvación”. MCG (“Charlie’s Angels”, “We Are Marshall”)
dirigió la cinta basándose en un guión de John Brancato & Michael Ferris
(“Terminator 3: Rise of the Machines”).
“Terminator – La Salvación” fue producida por Mortiz Borman, Jeffrey
Silver, Victor Kubicek y Derek Anderson. Peter D. Graves, Dan Lin,
Jeanne Allgood, Joel B. Michaels, Mario F. Kassar y Andrew G. Vajna
fungieron como productores ejecutivos. Chantal Feghali coprodujo la
cinta, y James Middleton se desempeñó como productor asociado.
La cinta está protaginizada por Christian Bale (“The Dark Knight”), Sam
Worthington (“Avatar”), Anton Yelchin (“Star Trek”), Moon Bloodgood (“What
Just Happened”), Bryce Dallas Howard (“Spider-Man 3”), Common (“Wanted”),
Jane Alexander (“The Unborn”) y Helena Bonham Carter (“Harry Potter and
the Half-Blood Prince”).
El equipo creativo que se encuentra tras bambalinas incluye al
cinematógrafo Shane Hurlbut (“We Are Marshall”), al diseñador de
producción Martin laing (“Pearl Harbor”), al editor galardonado Conrad
Buff (“Totanic”), al diseñador de vestuario Michael Wilkinson (“Watchmen”),
a Charles Gibson (“Pirates of the Caribbean”: Dead Man’s Chest”), que es
un supervisor de efectos visuales galardonado con un Oscar, y el
supervisor de animatronics John Rosengrant, miembro de los Estudios de
Stan Winston. La música es de Danny Elfman (“Milk”, “Big Fish”, “Goos
Will Hunting”, “Men in Black”), quien ha sido nominado para un Oscar en
cuatro ocasiones.
“Terminator – La Salvación” goza de la distribución doméstica de Warner
Bros. Pictures. Sony Pictures Releasing International distribuye la
cinta en la mayoría de los territorios internacionales (salvo Corea del
Sur y algunas zonas de Medio Oriente).
www.TerminatorSalvation-movie.net
ACERCA DE LA PRODUCCIÓN
“Nuestro destino ha sido creado por nosotros mismos”
El Principio del Fin
El drama humano que ocupa el corazón de la cinta “Terminator – La
Salvación” se desarrolla sobre el telón de fondo de una Norteamérica
post-apocalíptica completamente devastada tras los sucesos del Día del
Juicio Final.
“Nuestra labor ha consistido en contar la historia del mundo justo
después del Juicio Final”, comenta McG. “Ésta es la historia del devenir
de John Connor, del devenir de Kyle Reese, del fortalecimiento de Skynet,
y de las fuentes últimas de nuestro humanismo. Es el momento en el que
la humanidad decide rebelarse contra las máquinas”.
Durante la materialización del largo tiempo prometido futuro de
“Terminator”, McG quiso crear una visión no menos realista. “No deseé
filmar a los actores contra una pantalla verde; quería que sus
reacciones fueran provocadas por Terminators físicos”, dice el director.
“Quería aprovechar la desolación del Oeste Americano – una vastedad que
insinúa un mundo lleno de dificultades palpables. A causa de las bombas
que han estallado y dañado el ozono, el cielo es de un color distinto.
La tierra posee cualidades diferentes, así que puedes caer de inmediato
en la cuenta de que algo está mal”.
El productor Derek Anderson, quien junto con Victor Kubicek, su socio en
The Halycon Company, es propietario de los derechos de la franquicia,
recuerda lo siguiente: “Cuando conocimos a McG descubrimos que su visión
se parecía mucho a lo que nosotros mismos teníamos en mente”.
“Sin lugar a duda, McG era el director indicado para esta película,
sobre todo gracias a su habilidad, su entusiasmo y su pasión por la
historia”, añade Kubicek. “Sabíamos que lograría apuntalar la esencia de
la saga”.
Antes de convertirse en el director de la cinta, McG había sido fanático
de la serie. “The Terminator”, escrita y dirigida por James Cameron, fue
lanzada en 1984 y dio a conocer al Modelo 101 T-800 creado por los
Sistemas Cyberdyne, interpretado por Arnold Shwarzenegger. El T-800 es
transportado al pasado por Skynet, el sistema de inteligencia artificial
que ha fungido como creador de los Terminators, a fin de detener el
nacimiento del futuro líder de la Resistencia. Pero este líder también
envía a un soldado humano, Kyle Reese (Michael Biehn), para proteger a
Sarah Connor (Linda Hamilton) y, ultimadamente, para procrear un hijo
con ella – un chico que crecerá para convertirse en el enemigo más
temible de Skynet.
“Una de las cosas que aprendimos acerca del Terminator desde la primera
parte es que es una bestia imparable que no hace sino avanzar y
avanzar”, dice McG, “una máquina que hará todo lo posible para dar
alcance a su presa; incluso cuando ha volado en mil pedazos, no puede
parar hasta no ver su misión cumplida”.
La siguiente obra de Cameron, “Terminator 2: Judgement Day”, lanzada en
1991, se convirtió en un fenómeno taquillero de proporciones mundiales.
La historia es retomada justo después de que sarah Connor ha sido
encerrada. Su hijo, el adolescente John Connor (Edward Furlong), debe
encarar a un muy sofística robot T-1000 (Robert Patrick), que Skynet ha
enviado desde el futuro para exterminarlo. Pero el Connor del futuro
envía a un T-800 (Arnold Schwarzenegger) para proteger a su juvenil
encarnación. Juntos, Sarah, John y su nuevo aliado intentarán
sobreponerse al T-1000 y detener el Día del Juicio.
“Yo tenía 17 años y acababa de llegar a Estados Unidos cuando ‘T2’
apareció en cartelera”, comenta Christian Bale, quien ha interpreta a
John Connor en “Terminator – La Salvación”. “La sola emoción que el
público irradiaba en la sala de cine – nunca antes había experimentado
algo similar. No podía escuchar los diálogos a causa de los gritos”.
El director Jonathan Mostow cerró la primera trilogía en 2003 con
“Terminator 3: Rise of the Machines”, en la que el terrible evento que
Connor (Nick Stahl) y su madre intentaron detener a lo largo de sus
vidas – el Día del Juicio – provoca una guerra mundial de proporciones
nucleares, orquestada por Skynet.
“Terminator 3” fue coescrita por John Brancato & Michael Ferris, quienes
han retornado a la franquicia para escribir el guión de “Terminator – La
Salvación”. En palabras de Brancato, “Desde que cerramos la trilogía
original mediante la destrucción del mundo, caímos en la cuenta de que
no podíamos abrevar de nuevo en el pozo de los Terminators que viajan en
el tiempo. El nuevo proyecto tenía que girar en torno a lo que ocurriría
tras la caída de las bombas”.
Ferris añade que, “Nosotros queríamos escribir algo acerca de la muy
vaticinada batalla entre humanos y máquinas, lo que a su vez nos
permitiría modificar el tono general de la franquicia. Las primeras
cintas se desarrollaban en un mundo familiar y contemporáneo; pero esta
nueva parte constituye una película de guerra, ambientada en un futuro
post-apocalíptico mucho más denso y oscuro”.
“Terminator – La Salvación” ocurre en el año 2018, catorce años después
del ataque nuclear que cerró la trilogía previa. El productor Moritz
Borman, quien asimismo fungió como productor ejecutivo en “Terminator
3”, señala que, “Desde el principio decidimos que así como las cintas
anteriores estuvieron ambientadas en la actualidad, ‘Terminator – La
Salvación’ comenzaría a revelar un futuro que sólo pudimos atisbar de
cuando en cuando en las primeras partes. Así que ahora hemos dado un
salto hacia la adolescencia de Kyle Reeves , esto es, una época en la
que aún los personajes desconocen su futuro, sobre todo el viaje a
través del tiempo que constituye el motor de la historia. En esta cinta,
nos encontramos inmersos en la guerra que había sido vaticinada, y por
ello podemos ver a Connor erigirse en el líder de la Resistencia”.
En “Terminator – La Salvación”, “Skynet ya domina el panorama, pero aún
está en fase evolutiva”, comenta Bale. “La especie humana comienza a
apagarse. Los hombres se encuentran contra la pared en estas
circunstancias desesperadas. Éste es el último esfuerzo que se realizará
en pro de la supervivencia de la humanidad”.
“Todo es ahora muy difícil para los humanos”, subraya McG. “La comida
escasea, al igual que la energía. Todo se ha agotado. Y todos se sienten
perseguidos, con justa razón”.
Sin embargo, según Borman, “La humanidad debe mantener viva la
esperanza. Tiene que haber algo en su forma de vida que les permita
creer que existe un futuro allende las máquinas y que el mundo mismo
podrá resurgir de las cenizas. Esta esperanza está representada por John
Connor”.
“SI ESTÁS ESCUCHANDO ESTO, TÚ FORMAS PARTE DE LA RESISTENCIA”:
UN VIEJO ENEMIGO EN UN FUTURO NUEVO
Para encarnar al personaje que constituye el fulcro de esta vasta saga,
McG eligió a Christian Bale, quien se convirtió en un elemento
indispensable de su visión para esta cinta. “Christian es un talentoso y
maravilloso actor, y un colaborador extraordinario”, dice el director.
“Pocos actores pueden inyectarle el mismo peso y la misma gravedad que
Christian a la pantalla”.
Los realizadores emprendieron la búsqueda de Bale mientras éste se
encontraba en Londres filmando “The Dark Knight”. “Arreglamos un
encuentro entre McG y Christian”, rememora la productora ejecutiva
Jeanne Allgood. “Christian se mostró dubitativo al principio, porque
necesitaba saber si este proyecto suponía algo más que una mera cinta de
acción”.
Durante las primeras fases del proceso de desarrollo, un nuevo John
Connor comenzó a cobrar forma. “Nuestro héroe es más viejo y ha pasado
por la experiencia del Día del Juicio”, explica Bale. “Un evento como
ése puede alterar al más valiente, así que en varios sentidos, Connor es
una persona completamente distinta”.
Connor se encuentra en la línea de frente de la Resistencia, pero aún no
es su líder. Los nuevos desarrollos de Skynet han cimbrado su visión del
futuro, que él mismo formó a través de las narraciones de su madre. Ella
creía que el futuro no estaba definido, y Connor duda cada vez más de
que pueda permanecer con vida a fin de que pueda dar inicio a los
eventos que desembocarán es su propia concepción y que darán la pauta
para que Kyle Reese sea enviado al pasado con el propósito de proteger a
su madre.
“John Connor no sabe si puede convertirse en el John Connor del que su
madre solía hablar”, señala el productor Jeffrey Silver. “Porque sabe
muy bien que hay una cierta cantidad de futuros posibles. Este personaje
despliega una osadía y una complejidad increíbles, y Christian pudo
entregarnos la interpretación multifacética que su importante papel
demanda”.
El hombre en que Connor se ha convertido es a la vez una extensión de su
juventud y alguien completamente nuevo. Según Bale, “Él es un tipo con
muchos problemas a cuestas, alguien a quien se la hablado toda su vida
acerca del futuro, con toda la carga que una sabiduría así implica. Pero
su madre le dijo asimismo que no hay ningún destino, salvo el que uno
mismo se va forjando, y tener esto en mente le impide refugiarse y
pensar que todo estará bien. Connor tiene que salir a pelear. Y él es un
auténtico luchador. Yo lo visualizo como un personaje similar a Aquiles.
Él adora batirse en combate. Pero él tiene que confrontar aquello que
los soldados encaran día a día – la pérdida de sus mejores amigos – y su
temor es no poder ser el líder que la gente probablemente espera a esas
alturas”.
Además de sus rozones con los líderes de la Resistencia y de sus temores
acerca de la fuerza e innovaciones de Skynet, una nuevo elemento ha
destrozado la visión del futuro que acompañó a Connor durante sus años
formativos: la aparición de un hombre cuya existencia nunca antes había
sido mencionada – un híbrido de máquina y hombre llamado Marcus Wright.
Según John Brancato, “La clave de esta historia fue la creación de este
personaje insólito, cuyas batallas internas reflejan el conflicto
general”.
A fin de crear un antihéroe lo suficientemente fuerte como para poder
oponerse al Connor de Bale, los realizadores eligieron a Sam Worthington,
quien poco antes había concluido su trabajo en “Avatar”, la más reciente
cinta del creador de “Terminator”, James Cameron. “Sam es un tipo rudo,
básicamente, pero al mismo tiempo puede mostrar su innata sensibilidad
humana”, comenta McG. “Sin duda está a la altura de Christian, y esto es
formidable si tomamos en cuenta que Christian es un actor como pocos.
Desde el principio supimos que Sam era nuestro hombre”.
El último recuerdo de Marcus Wright guarda relación con una sentencia de
muerte por un crimen: él no sabe por qué ha llegado a este mundo ni cuál
es su propósito. “Marcus había sido sentenciado a muerte”, dice Sam
Worthington. “Fue ejecutado. Pero más tarde despertó en un mundo
post-apocalíptico y este hecho le ha compelido a embarcarse en una
aventura surrealista en pos de respuestas concernientes a su propia
supervivencia”.
“Para empezar, nadie sabe quién es Marcus”, dice Bale. “Él es una
persona que cuenta con un pasado, asediado por sus remordimientos. A lo
largo de esta cinta, el eje temático tiene que ver con la necesidad de
una segunda oportunidad”.
La noción de una segunda oportunidad es lo que ha compelido a la Doctora
Serena Kogen a entablar comunicación con Marcus mientras éste aguarda su
ejecución. Científica que trabaja para el departamento de genética de
Cyberdyne Systems, Serena es un personaje interpretado por Helena Bonham
Carter. “Helena desempeña el papel de una científica sumamente
proficiente que está familiarizada con el manejo de la tecnología más
avanzada”, dice McG. “Más aún, ella se siente motivada por el terrible
hecho de que padece cáncer terminal. Pero está convencida de que sus
investigaciones podrían concederle a gente como ella una segunda
oportunidad. Sin embargo, sus resultados caen en manos de Skynet, y las
consecuencias de este hecho constituyen una auténtica revolución para
las máquinas. Ella es la que ha enlistado a Marcus para que éste done su
cuerpo para lo que ella llama sencillamente ‘un experimento’, y su
rostro es lo último que el condenado mira antes de sucumbir”.
A la deriva en un muendo nuevo y extraño, ataviado con ropas robadas y
haciendo un notable esfuerzo para soportar todo lo que le viene
ocurriendo desde su ‘muerte’, Marcus es salvado de las garras de un
Terminator por un jovencito, interpretado por Anton Yelchin, que se
presenta como Kyle Reese. “Marcus se adentra en un edificio abandonado,
pero es interceptado por un T-600 que inmediatamente después comienza a
dispararle”, explica Yelchin. “De pronto, de la nada, un chico aparece
corriendo y lo saca de ahí. Este chico es Kyle Reese. Y podemos
escucharlo proferir la misma frase que dijera en la primera parte, ‘Si
deseas vivir, ven conmigo’”.
Kyle, que eventualmente viajará al pasado para salvar a Sarah Connor,
sigue siendo un adolescente que lucha por su propia existencia. “Kyle es
un tipo rudimentario; un sobreviviente muy crudo”, dice McG. “Yo deseaba
que dichas cualidades resultaran evidentes en esta versión juvenil del
personaje de Michael Biehn, el intérprete del Kyle adulto en ‘The
Terminator’, por la sencilla razón de que nuestra historia se desarrolla
unos diez antes del viaje de este hombre al pasado”.
Yelchin, un admirador de esta saga desde la infancia, se mostró muy
emocionado con la posibilidad de interpretar a un Kyle Reese
adolescente. “hablé con McG acerca de todo lo que este muchacho debe
atravesar para más adelante lograr convertirse en el tipo intenso de la
primera parte”, afirma en tono meditativo. “¿Por qué se convierte en un
hombre tan fuerte y rudo? Bien, pues aquí veremos que él ya poseía un
principio de estas cualidades. Kyle ha aprendido a sobrevivir día a día,
comiendo cualquier cosa. Está afuera, en las calles, y se sabe rodeado
tanto por robots T-600 como por otros humanos carroñeros muy poco
amistosos”.
Mientras Kyle escucha la programación de onda corta que John Connor
transmite, mientras sueña con sumarse a la Resistencia, el héroe
revolucionario lo busca por doquier. “Connor necesita encontrar a Kyle
Reese, a su padre, que en este punto de la historia sigue siendo un
simple muchacho”, comenta Bale. “Kyle no puede siquiera imaginar el
importantísimo papel que él mismo desempeñará en el futuro, y Connor no
puede revelarle nada de esto. Los viajes en el tiempo pueden dejarte un
poco dañado”, comenta el actor con una sonrisa.
Pero Kyle no se encuentra solo en este viaje. Le acompaña Star, una niña
de nueve años muda a causa del trauma de la guerra y los eternos
desplazamientos. Interpretada por Jadagrace Berry, Star posee la extraña
habilidad de presentir presencias aún lejanas, pero de manera más
importante, su propia presencia le insufla a Kyle un sentido de la
esperanza mucho más profundo. “Ella es el punto de vulnerabilidad máxima
para Kyle porque Star su responsabilidad más apremiante”, dice Yelchin.
“Me parece que si ella no estuviera ahí, él no se esforzaría demasiado,
incluso a pesar de la Resistencia”.
“En cierto sentido, Star encarna la inocencia en esta historia”, dice
McG. “Ella encarna la esperanza. Si miras su cara un instante, te podrás
decir, ‘Para esto luchamos. Porque queremos que la gente como ella siga
viva. El futuro está en ella’. A diferencia de todos los que recuerdan
un mundo anterior, ella ha crecido en un ambiente regido por la
brutalidad de las máquinas. Esto le ha dado le ha conferido la habilidad
de percibir su presencia, y de esta forma su ayuda resulta crucial de
cuando en cuando”.
Sobreviviendo día a día, Kyle, Star y ahora Marcus se sienten amenazados
por otros refugiados humanos que conocen a lo largo de su viaje. Pero
también reciben ayuda inesperada. Este estado de cosas incluye a
Virginia, interpretada por Jane Alexander. Cuando el resto de su grupo
amenaza con ahuyentar al trío de viajeros, Virginia descubre la manera
de compartir con ellos los escasos recursos de que disponen. De acuerdo
con Worthington, “La ironía, por supuesto, es que sólo en estas
circunstancias, en las que la vida misma es un reto, Marcus puede
experimentar la compasión humana y la generosidad auténtica”.
Marcus, Kyle y Star tienen que separarse cuando son emboscados por un
Cosechador – una máquina gigantesca en forma de insecto con múltiples
brazos que busca a su presa y la arroja en un Transportador. Éste
llevará al pobre humano de vuelta a Skynet. Perseguidos por una armada
de Terminators- que van desde los masivos Cazadores-Asesinos hasta los
relucientes Moto-Terminators, que constan de dos ruedas – a lo largo de
muchas millas recorridas en carreteras y sobre el descampado, sobre
puentes y en los ríos de violento oleaje, Kyle y Star son finalmente
capturados por el Cosechador y depositados en un Transportador. Su
destino es incierto.
“He ahí parte de la tristeza inherente al mundo de las máquinas”,
comenta McG. “Has hecho tu mejor esfuerzo, pero esto no basta. Resulta
imposible acabar con estas máquinas. A pesar de todo lo que Kyle y
Marcus les arrojan, las cosas no cambian. Nada puede detenerlas”.
Tras eludir la captura, Marcus salva la vida de una piloto de un avión
A-10 que ha sido derribado. Ella ha tenido que salir disparada en
paracaídas tras fallar en su misión, consistente en rescatar a un puñado
de humanos de las garras de un Cosecahdor. La piloto no es otra que la
despampanante Blair Williams, quien conduce a Marcus hasta la base de la
Resistencia. “Blair es una piloto de guerra brillante, pero asimismo una
superviviente”, dice McG. “Ella sabe muy bien cómo maniobrar, destruir
máquinas y, sobre todo, sobrevivir. Su vida ha sido salvada por Marcus,
así que ella sabe muy que está en deuda”.
Blair Williams es interpretada por Moon Bloodgood, quien personifica las
cualidades que los realizadores imaginaron para esta guerrera de la
Resistencia, tan segura de sí misma. Sin embargo, su entereza no está en
pugna con la fortaleza femenina que hasta el momento ha caracterizado
todas las cintas de “Terminator”. “Vamos, si una bomba nuclear cayera
sobre la ciudad de Los Ángeles, estoy seguro de que Moon sería la última
en caer”, bomea McG. “Así que obtuvo el trabajo”.
Camino de la base de la Resistencia, Marcus pisó una mina. Llevado con
premura a un puesto de los Rebeldes, es atendido inmediatamente por Kate
Connor, la esposa de John, interpretada por Bryce Dallas Howard. “Tras
los sucesos del Día del Juicio, Kate se transformó en doctora, o al
menos se entrenó lo mejor que pudo das las circunstancias”, comenta
Howard. “Ella ha encontrado unos cuantos libros y ha intentado hablar
con la mayor cantidad de supervivientes, aprendiendo diversas técnicas
para salvar las vidas de los demás”.
Kate es asimismo la compañera de Connor en esta lucha incesante. “John
es un soldado y Kate una doctora, y en ese sentido forman un equipo
formidable y muy estrecho”, dice McG. “Ambos son inteligentes y poseen
una destacada voluntad de liderazgo. Resultaba crucial hallar una Kate
Connor que estuviese a la altura de su destino, y en mi opinión Bryce
poseía la elegancia y la inteligencia para hacer creer a la gente que
ella podría mantener el orden de ocurrirle algo a John Connor. Kate y
Blair mantienen viva una de las tradiciones de la saga, la de los
personajes femeninos fuertes y autosuficientes”.
Kate es la primera en constatar que el cuerpo de Marcus ha sido
modificado y convertido en un tipo de Terminator nunca antes visto: un
híbrido con corazón, cerebro y exterior humanos, pero con el mecanismo
interior de un robot.
Completamente ignorante de su transformación, Marcus se siente
sobrecogido con el descubrimiento de que su ejecución en manos del
Estado no supuso sino el preludio de una nueva manera de ser. “Marcus
tiene brazos y piernas de metal, pero aún posee un corazón y un cerebro
humanos, y ése el meollo del asunto”, comenta Worthington. “¿Bastan
estas características para proteger su humanidad? Él se considera
humano, pero a excepción de Blair, el resto del mundo le teme y lo toma
por enemigo, incluyendo a Skynet. Pero me parece que esta cinta explora
el poder de la libertad de elección humana, del libre albedrío, y lo
hace a través de este personaje. A pesar de que su condición ha sido
exacerbada con esta maquinaria, su corazón humano es auténtico”.
“La confianza desaparece en cuento ellos descubren que se trata de un
híbrido”, dice Moon Bloodgood. “Pero Blair puede distinguir sus
esfuerzos y su valentía. Ella ha visto una parte de él que los demás
sencillamente desconocen. Él le salvó la vida e incluso le abrió su
corazón. Y Blair no tiene miedo de contradecir a John Connor, porque sus
valores son mucho más importantes para ella que la existencia del héroe,
o que la mismísima lucha contra Skynet”.
Desempeñándose como la mano derecha de John Connor, como sus ojos y
oídos, Barnes, el segundo de abordo, debe vigilar a Marcus mientras éste
no sea analizado. Barnes es interpretado por el actor y músico Common, a
quien Bale describe como “sencillamente fenomenal. Él es una de las
personas más increíbles que haya podido conocer a lo largo de mi vida.
Su trato es ligero y afable, pero además es un buen actor. En esta
ocasión él encarna al teniente Connor, y puedo decirte que ha realizado
un trabajo excepcional”.
“Barnes es, en múltiples sentidos, un guerrero espiritual que luchará
hasta el fin al lado de Connor y en pro del futuro de la humanidad. Para
él, Marcus es una amenaza”, dice Common. “Sin embargo, él mismo ha
tenido que atravesar situaciones adversas que lo han forzado a buscar
una razón espiritual para la lucha, e incluso para el destino de John
Connor. Y todo esto se relaciona de algún modo con Marcus”.
Conforme cambia la situación, Connor comienza a creer que sus propias
estrategias deben modificarse dramáticamente, y esto lo enemista con el
líder oficial de la Resistencia, el General Ashdown, interpretado por
Michael Ironside, veterano actor de ciencia-ficción. “Michael Ironside,
con quien yo había trabajado previamente en ‘The Machinist’, encarna al
líder de la Resistencia, y en esta cinta nuestras posturas opuestas
propician un notorio distanciamiento. Sin embargo, es fácil convencerse
de que sólo alguien como él podía convertirse en el líder de esta
cuadrilla de milicianos carroñeros”, explica Bale.
John Connor cae en la cuenta de que la única forma de estar a la altura
de las estrategias de combate de Skynet, en sempiterna evolución,
consiste en entablar un combate justo en el corazón de este monstruo. Y
Marcus podría ser la llave de acceso que les permita infiltrar la red.
“La tarea de Connor es desesperanzadora”, comenta Bale. “Claro, tiene
armas, pero sus esfuerzos son como arrojar piedras y palos contra las
murallas de una fortaleza... Pero ahí está Marcus. Así que Connor debe
confiar a pesar de su instinto y romper cada una de las reglas que él
mismo se ha impuesto. Él sabe muy bien que las máquinas pueden manipular
los mejores aspectos de la humanidad. ¿Cómo podría creer en alguien que
decididamente es una máquina?”
Su única esperanza es la confianza mutua, y con esto podría bastarles.
“¿En donde yace eso que llamamos ‘sentido de humanidad?”, se pregunta el
director. “¿Tendrá que ver con la solidez y entereza del corazón? ¿Qué
es lo que nos compele a dar la vida por otros? Esto es lo que las
máquinas jamás podrán medir”.
“LAS MANOS DEL DIABLO HAN ESTADO MUY OCUPADAS”:
CONSTRUYENDO UN EJÉRCITO DE TERMINATORS
“Uno de los placeres más grandes de esta película consiste en poder ver
a todas las máquinas que forman parte del catálogo de Skynet”, dice McG.
“Son como una armada contemporánea: hay máquinas acuáticas, terrestres,
aéreas... La sola visión de todas estas máquinas constituyó una aventura
asombrosa, porque como espectadores queremos atestiguar los éxitos y
fracasos que condujeron a la creación del T-800, que no es otra cosa que
su máquina asesina más eficaz”.
Creada con base en ciertos dibujos por el diseñador de producción Martin
Laing y por un equipo conformado por numerosos directores artísticos, la
armada mecánica que irrumpe violentamente en “Terminator – La salvación”
cobró vida gracias a la dirección de Stan Winston, el legendario creador
de monstruos que diseñó el T-800 original. Tristemente, Winston murió
durante la filmación de este nuevo episodio. “Stan me confió cierta vez
que de niño creaba monstruos imaginarios para sentirse acompañado”,
rememora McG. “Me dijo asimismo que él creía ser el único niño en el
mundo que necesitaba echar mano de este recurso. Qué sorpresa para él
cuando sus amigos de la infancia se convirtieron en los héroes de
millones de personas alrededor del mundo. Pero, sobre todo, Stan era un
buen tipo al que le encantaba su trabajo. Para mí fue un auténtico honor
haber podido trabajar junto a Stan Winston. Esta cinta se la dedico a su
recuerdo”.
John Rosengrant, el supervisor de efectos del Estudio de Stan Winston,
dirigió a un equipo de sesenta personas con el único propósito de crear
la nueva generación de Terminators, pero también supervisó el maquillaje
y los efectos especiales. Winston había contratado a Rosengrant para
trabajar en la primera parte de “Terminator”, convirtiéndose así en su
mentor. Así dio inicio un viaje increíble, a lo largo del cual estos
hombres pudieron atestiguar los fenomenales avances en materia de
animación y efectos especiales.
Para Rosengrant, la ingente cantidad de trabajo de esta producción
exigió asimismo algunas innovaciones. “El reto consistió en utilizar
materiales ligeros que semejaran metal”, dice. “Echamos mano de una
combinación de uretano y plástico, y pintamos todo el material
utilizando las técnicas más innovadoras a fin de otorgarle esa
apariencia metálica”.
En “Terminator – La Salvación”, el reto consistió asimismo en crear
Terminators que fueran una extención lógica de todo lo que hemos visto
en el universo de la saga. “Ya que nos encontramos en una época anterior
a la que determina las tres primeras partes, en cierto sentido tuvimos
que implementar una especie de ingeniería reversible”, explica Laing.
“De la misma forma que la laptop que tenías hace diez años era más
gruesa que un ladrillo, y de la misma forma que ésta comenzó a
adelgazarse a lo largo de los años a través de nuevos modelos, los
Terminators que ya conoces son como las computadoras más delgadas y
avanzadas, y los Terminators de esta cinta son los ladrillos. Son más
primitivos en su brutalidad y más grandes en su diesño”.
Además, McG tenía una estética específica en mente y con ella colorearía
la cinta entera, pero sobre todo las máquinas. “Yo no quería un mundo
lustroso y robótico”, confiesa McG. “No quería un futuro limpio y
estéril. De hecho, anhelaba lo contrario: un futuro caótico. Quería que
una pátina de polvo recubriera el metal de las máquinas, como si se
tratase de una serie de tanques soviéticos descuidados”.
Más aún, a causa de que la cinta se desarrolla en la época
inmediatamente posterior a los sucesos del Día del Juicio, podemos
descubrir una orquesta completa de Terminators. Muchos de ellos, por
cierto, fueron mencionados de pasada en las cintas previas. “En esta
cinta nos encontramos en un periodo intermedio”, dice Christian Bale.
“En ese viaje al futuro que supone el año 2029 de las cintas anteriores,
Skynet ha logrado un control total de todos los ejércitos conformados
tanto por T-800 como por Cazadores-Asesinos. Pero esta vez podremos
presenciar la génesis del T-800. De hecho, en este presente contamos con
un sinnúmero de T-600, que no son más que versiones primitivas del
T-800, y esta selección de máquinas es realmente fenomenal”.
El soldado más destacado de Skynet es el T-600, que McG describe como
“más grande y cruel” que el T-800, “como un Buick ’57 comparado con un
Mercedes Benz 2009”.
Monstruo de más de siete pies de altura, versión rudimentaria de lo que
eventualmente se convertiría en el T-800, con una delgada piel de
plástico recubriendo su rostro y vestimenta común e improvisada para
ocultar el endoesqueleto, el T-600, “merodea por esa tierra de nadie en
busca de cualquier cosa con corazón, máquina imparable programada para
una sola cosa: el asesinato”, explica McG.
Estos robots portan un arma minúscula, una pistola M203 que puede
disparar entre 3,000 y 6,000 cargas por minuto. También llevan una
mochila repleta de municiones. Los realizadores querían diseñar a los
T-600 como máquinas no manufacturadas que patrullan los descampados, que
lucen golpeadas y gastadas, prácticamente sin camuflaje, dañadas en el
campo de batalla o carcomidas por los elementos. Tal y como Kyle Reese
dijo en “The Terminator”: “Era muy sencillo detectar las primeras
máquinas”.
Creados mediante la utilización de marionetas en ocasiones manipuladas
por hombres y tecnología CGI, los robots T-600 de la cinta aparecen en
distintos estados de deterioro. “Esta apariencia les otorga una cualidad
como de zombi, sumamente siniestra, sobre todo cuando observas, por
ejemplo, su mandíbula expuesta o algunas áreas destrozadas del rostro”,
dice Rosengrant.
En las cintas anteriores pudimos ver una nave llamada el
Cazador-Asesino. Los Cazadores-asesinos, o H-K por sus siglas en inglés,
patrullan los cielos y revisan la tierra desde el aire con sus potentes
reflectores. Tal y como ocurre con los T-600, la versión más reciente de
estos H-K representa un modelo bestial mucho más rudimentario que el que
Skynet desarrollaría eventualmente.
Unos pequeños dispositivos llamados Aerostats patrullan como zánganos a
la espera de la aparición súbita de algún superviviente humano. Estos
centinelas aéreos de cuatro pies de largo emiten un zumbido mientras
recorren las vastedades en busca de cualquier señal de vida humana.
Equipados con una cámara digital y tecnología láser, envían sus informes
a Skynet, y ésta a su vez envía al Cosechador.
“Uno de mis Terminators favoritos es el Cosechador, que es una máquina
que sirve para la recolección de personas”, dice McG. Con más de ochenta
pies de altura, el Cosechador semeja una araña con múltiples brazos de
acero y con unas piernas que salen de un cuerpo parecido a un tórax que
a su vez cuenta con apéndices semejantes a garras y que sirven para
capturar a la presa, así como con múltiples cámaras colocadas en las
cimas de una cierta cantidad de tallos metálicos. Estos lentes pueden
ver y registrar la carnicería. “Su trabajo consiste en introducirse en
los refugios humanos, atrapara a su presa y colocarla en los
Transportadores que la llevarán a Skynet”.
Si esta estrategia falla, el Cosechador despliega sus Moto-Terminators.
“Como el Cosechador es una bestia enorme, la recolección de humanos
jamás será completa: unos cuantos se le escaparán siempre”, prosigue
Laing. “Así que, tal y como ocurre con los pastores, que utilizan perros
para reagrupar al redil, el Cosechador tiene Moto-Terminators, que son
algo así como motocicletas que persiguen a los humanos trayéndolos de
vuelta. Estos robots tiene pistolas y están programados para matar, pero
la meta no es otra que recopilar a los que han escapado a fin de
devolverlos al Cosechador para que éste, a su vez, los coloque en el
Transportador”.
Estas máquinas tan pulidas tienen como modelo las motocicletas Ducati,
que son las favoritas del director McG. Los realizadores contactaron a
la compañía italiana y ésta se sintió más que honrada. De hecho, la
compañía les proporcionó cuatro motocicletas hiper-motorizadas para la
filmación.
“Necesitábamos Moto-Terminators capaces de irradiar una cierta
credibilidad, así que abordamos a los diseñadores y al resto del equipo
de Ducati”, comenta McG. “Las Ducati son máquinas relucientes, poderosas
y ágiles, y por ello nos parecieron un gran punto de partida para crear
el lenguaje de los Moto-Terminators”.
El equipo de efectos visuales logró yuxtaponer la apariencia de los
Moto-Terminators a las muy prácticas Ducatis. Asimismo fabricaron un
Moto-Terminator real en Los Ángeles, utilizado durante la filmación.
Skynet ha poblado la tierra con esta máquinas, pero para los océanos,
lagos y ríos, el extraño emporio ha desarrollado un Terminator
subacuático único: el Hydrobot. Muy parecido a una serpiente segmentada
de cuatro metros de largo, sin ojos y con una cabeza puntiaguda que
puede hundirse en el cuerpo de la víctima, el Hydrobot responde al
sonido y a las vibraciones que percibe en las aguas que patrulla. “Los
hydrobots resultaron ser personajes muy divertidos e interesantes”, dice
Rosengrant, “como una mezcla entre un cangrejo demencial y alguna
especie de serpiente marina. Son artilugios malvados y despiadados, con
sus pinzas y su taladro. Si uno de estos te atrapa, nada puede
salvarte”.
Estas máquinas constituyeron un reto muy particular para el equipo de
Rosengrant, “no sólo por sus detalles y minuciosidad, sino asimismo
porque teníamos que hacerlas funcionar en el agua, lo cual supuso un
trabajo infernal para todos nosotros”, prosigue. “Cuando trabajas con
agua, la mayoría de los dispositivos de control remoto no pueden ni
siquiera ser tomados en cuenta; en vez de ello, debes trabajar con
cables o neumáticos. Y nuestros Hydrobots tenían que ser resistentes por
la sencilla razón de que serían zarandeados y golpeados continuamente e
incluso arrojados desde helicópteros, pero tampoco debían ser tan toscos
que resultaran inmanejables”.
Al final, el equipo de producción utilizó una combinación de estructuras
ligeras de acero y fragmentos de uretano de bajo peso. Todo ello
contribuyó a crear una inconfundible apariencia metálica. “Terminamos
realizando una gran cantidad de tomas extraordinarias e inesperadas”,
explica Rosengrant. “Al principio y durante los experimentos con el
modelo práctico, todos pensamos que tendríamos que realzar las tomas con
CGI, pero al final nos quedamos con la boca abierta”.
Mientras observaba a los titiriteros de Stan Winston, Bale se sintió
inspirado. “Practicaron muchísimo y lograron perfeccionar todos los
movimientos”, dice Bale. “El equipo de Stan Winston es increíble
detallista, paciente y apasionado. Me encanta ver a la gente que se
obsesiona con su trabajo, y estos tipos están obsesionados con los
modelos que han construido. Ellos quieren perfeccionar y volver
completamente real la apariencia de un T-600 que gira su cabeza
violentamente su cabeza para atacar a alguien. Se toman su trabajo muy
en serio, y esto es maravilloso”.
Pero la creación más innovadora de Skynet no está hecha totalmente de
metal. Nos referimos, por supuesto, a Marcus, el híbrido que descubre a
lo largo de la cinta la adaptación de la que ha sido objeto.
El maquillaje y las prótesis de Marcus fueron creados por Rosengrant,
cuyo equipo desarrolló numerosas variaciones a fin de acoger las
distintas condiciones en las que Marcus se desenvuelve, incluyendo una
muestra completa de su endoesqueleto tras ser capturado por la
Resistencia.
Fruto de la combinación de prótesis importantes creadas mediante la
implementación de las tecnologías más avanzadas. Maquillaje y CGI, la
creación de Marcus constituyó un esfuerzo complejo que requirió
creatividad y paciencia, sobre de parte de Sam Worthington, quien a
veces pasó más de seis horas en una silla mientras tres maquillistas
trabajaban sus facciones y apariencia. General.
El efecto general, que McG logró con la ayuda de un equipo creativo de
artesanos provenientes de cada uno de los rincones de la producción, fue
una visión icónica que ha dado origen a un nuevo capítulo en la saga de
“Terminator”. “La trilogía anterior poseía otra temporalidad”, comenta
el director. “Nuestra cinta supone un nuevo comienzo. Ahora hemos
decidido mostrar el origen de estas temibles máquinas; y hemos decidido
adentrarnos en Skynet. Podremos ver la Unidad de Proceso Central que
culminará eventualmente en el triunfo, dominación y auge de las
máquinas. Es un sentimiento maravilloso: poder desempeñar un papel en la
continuación de esta historia increíble, que me ha inspirado tanto a lo
largo de mi vida y que incluso hoy día no pierde ni su relevancia ni su
carácter profético”.
Para Bale, quien pudo presenciar la filmación de las escenas de acción
viva de los Terminators, la emoción es igualmente intensa. Con mueca
irónica comenta que, “Durante la filmación nosotros nos creíamos las
figuras principales, pero en realidad no es así. El público no está
pagando por vernos. Nuestra función consiste en proporcionarle una
historia al proyecto, porque independientemente de la grandeza de los
Terminators y de lo impactante de las explosiones, sin una buena
historia, ¿qué caso tendría todo esto? Pero debemos aceptarlo: los
Terminators son las auténticas estrellas de la cinta. Y seguramente le
volarán los sesos a todos los integrantes de la audiencia”.
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