|
TÍTULO ORIGINAL:
‘Meet the Robinsons’
INFORMACIÓN DE PRODUCCIÓN
“Aquí, sin embargo, no nos quedamos mirando hacia atrás. Seguimos hacia
adelante, abriendo nuevas puertas y hacienda nuevas cosas… Y es la
curiosidad la que nos lleva hacia nuevos caminos”
Walt Disney
Si ustedes creen que su familia es diferente, esperen ver LA FAMILIA DEL
FUTURO, de un futuro sorprendente, divertidísimo e inventivo donde todo
es posible. En esta comedia de viaje en el tiempo, la última tecnología
digital de la animación de Walt Disney Feature Animation impulsa al
público al inesperado reino tecno del mañana donde los sueños más
alocados se hacen realidad… incluidos los de un joven inventor en busca
de un hogar.
La historia comienza con Lewis, un niño-genio que ama los aparatos y
dispositivos y que tiene la firme esperanza de encontrar a la familia
que nunca conoció. Pero su viaje está a punto de llevarlo a un lugar que
nunca hubiera imaginado, donde ya no existe lo imposible: el FUTURO.
Cuando Lewis se encuentra con un misterioso extraño llamado Wilbur
Robinson, se embarcará en el viaje de su vida a través del tiempo que lo
llevará repentinamente a conocer a una familia como no hay otra, que lo
ayudará a descubrir una serie de sorprendentes y emotivos secretos sobre
su ilimitado potencial. Pero este viaje también le ocasionará conflictos
con un villano que de tan torpe desacredita la misma maldad: El del
Sombrero, quien roba la única posibilidad de Lewis de llega a su hogar.
Con personajes inolvidables, inteligentes aparatos, villanos clásicos y
toda clase de llamativas exuberancias, LA FAMILIA DEL FUTURO continúa el
amado legado de Disney de mirar hacia adelante, hacia el deslumbrante
mundo del mañana, mientras desarrolla una historia acerca de creer en la
familia, en uno mismo y en el promisorio futuro.
Para agregar emoción, LA FAMILIA DEL FUTURO se presentará en más de 600
cines de los Estados Unidos en el revolucionario formato Disney Digital
3D™, el cual da vida al bello mundo de última generación de la animación
CG (generada por computadora), de modo que así se conforma una
experiencia sin igual junto con una mirada al futuro del entretenimiento
digital.
Walt Disney Pictures presenta LA FAMILIA DEL FUTURO, el debut en la
dirección de Stephen Anderson, quien previamente fuera el supervisor de
historia en Brother Bear y de Emperor’s New Groove de Disney. El guión
es de Jon Bernstein, Michelle Spitz; Don Hall, Nathan Greno, Aurian
Redson, Joe Mateo y Stephen Anderson, basado en el aclamado libro A Day
with Wilbur Robinson de William Joyce. La productora del film es Dorothy
McKim.
LA FAMILIA DEL FUTURO presenta un espectacular reparto de voces, entre
ellas, las de Angela Bassett – nominada al Premio de la Academia® –, Tom
Selleck –ganador del Emmy® y del Golden Globe–, Harland Williams, Laurie
Metcalf, Adam West, Ethan Sandler y Tom Kenny, entre otras. La música es
igualmente inventiva, ya que se escuchan la composición sinfónica
musical de Danny Elfman –dos veces nominado al Premio de la Academia®– y
las canciones The All-American Rejects, Rufus Wainwright y Rob Thomas,
como también temas de artistas como Jamie Cullum, They Might Be Giants y
the Jonas Brothers.
CONOZCAMOS A LOS ROBINSON:
QUIÉN ES QUIÉN EN ESTA FAMILIA
Lewis es huérfano, con el coeficiente intelectual de un genio y
apasionado por los inventos. Su naturaleza poco convencional y sus
inventos involuntariamente desastrosos le impiden conseguir lo que más
desea en la vida: una familia. Está convencido de que su única
oportunidad de lograrlo es encontrar a su madre biológica, entonces
inventa el Scanner de Memoria, una máquina capaz de encontrar dentro de
su mente el único recuerdo que podría tener de ella, antes de ser
abandonado cuando era bebé en la puerta del orfanato.
Wilbur Robinson es un misterioso niño del futuro, cuyos mayores defectos
-ser demasiado seguro de sí mismo, tener una actitud arrogante y hacer
bromas todo el tiempo- son también sus principales ventajas en la vida,
ya que le permiten estar siempre un paso adelante de sus adversarios.
Cuando se entera que su futuro depende de Lewis, viaja al presente a
buscarlo y se lo lleva a toda prisa en su máquina del tiempo, iniciando
un viaje en el cual ambos deberán lidiar con un feroz dinosaurio, sapos
con mentes controladas y villanos malvados, en un esfuerzo por salvar al
mundo del que viene Wilbur.
El Del Sombrero va siempre vestido de negro, y se cree un villano astuto
e intimidante, sin darse cuenta de lo incompetente que es en realidad.
Su maldad radica en un desafortunado episodio de su niñez, que lo
impulsó toda su vida a buscar el respeto que nunca logró obtener. Cuando
se asocia con Doris, un sombrero robot, se convierte en una amenaza para
el futuro, que solo Lewis y Wilbur podrán detener.
Doris es el moderno bombín que usa El Del Sombrero, y también es su
cómplice. A diferencia de su malvado compañero, Doris verdaderamente
posee inteligencia y astucia. También posee una cantidad de artilugios
para llevar a cabo sus maldades. Tiene un plan diabólico para arruinar
el futuro y no se detendrá ante nada con tal de vengarse de Lewis.
Mike “Goob” Yagoobian es el sufrido compañero de cuarto de Lewis en el
orfanato. Aunque tolera las pruebas, generalmente ruidosas y explosivas,
de los prototipos de Lewis, las largas noches sin dormir lo están
empezando a afectar. Cuando Lewis lo mantiene despierto toda una noche
por estar trabajando en los últimos toques del Scanner de Memoria, Goob
tiene tanto sueño al día siguiente que pierde la pelota decisiva durante
el esperado partido final de béisbol, una humillación tan grande que no
sólo lo afecta a él sino al futuro en general.
Mildred es la dulce y paciente encargada del orfanato. Quiere a todos
los niños que viven allí, pero siente un particular cariño hacia Lewis,
a quien crió desde que lo abandonaron en el umbral cuando era un bebé.
La Familia Robinson
Cornelius es el padre de Wilbur y es conocido como “el fundador del
futuro”. Es un increíble inventor y el muy admirado dueño de las
Industrias Robinson.
Franny es la inquieta y entusiasta madre de Wilbur, que descubrió la
forma de enseñar a los sapos cómo cantar y tocar música al mejor estilo
de las grandes bandas.
Carl es el sofisticado robot de la familia Robinson, siempre dispuesto a
servirla con ingenio y un encanto especial. Además, tiene la
desafortunada tarea de sacar constantemente de apuros a Wilbur. Carl
también es muy hábil con las damas, y por ‘damas’, nos referimos a la
lavadora de platos, la cafetera y la tetera.
Abue Bud puede parecer un poco extraño para el mundo exterior, pero
dentro de la casa de los Robinson, sólo ve la vida de manera un poco
diferente. Le gusta usar la ropa al revés, con la parte de adelante
hacia atrás, y siempre está buscando su dentadura.
Abue Lucille sabe “hornear esas galletas”, según el Abue Bud, pero es
sólo su forma de decir que a ella le encanta bailar música disco. En
verdad, Abue Lucille es lo más alejado de la imagen de la típica abuela
que cocina galletas que uno pueda imaginar.
El Tío Art, siempre con impecable aspecto de héroe, es un repartidor
intergaláctico de pizza a domicilio, que toma su trabajo muy en serio.
Su misión en la vida es atravesar el espacio en su nave espacial para
entregar la pizza perfecta en 30 minutos en cualquier lugar de la
galaxia… En caso contrario, es sin cargo.
La Tía Billie está obsesionada con los trenes de juguete desde que era
niña. Ahora que es una persona adulta, todavía juega con trenes de
juguete. Sólo que ahora son de tamaño real y viajan a través de la casa
de los Robinson.
El Tío Gastón, a quien le gusta ser hombre-bala y correr carreras con el
tren de la Tía Billie.
El Tío Fritz y la Tía Petunia tienen un matrimonio un poco extraño. Ella
es bastante malhumorada y se desquita siempre con el Tío Fritz. Además,
ella es una marioneta.
El Tío Joe pasa el día mirando programas de gimnasia en la TV desde su
confortable sillón; esa es su idea de “hacer ejercicio”.
El Primo Laszlo pinta murales mientras vuela con su casco a hélice.
La Prima Tallulah es una diseñadora que usa un sombrero con forma de
rascacielos.
Lefty es un pulpo violeta de un solo ojo y es el mayordomo de la casa.
Los Tíos Spike y Dimitri viven en las macetas de cerámica que enmarcan
la entrada de la casa. Son como el sistema de alarma humano de los
Robinson: si alguien toca las macetas, ellos gritan.
Buster es el perro de la familia. Búster debe usar anteojos porque el
seguro médico no le cubre los lentes de contacto.
Frankie el Sapo es el líder de la orquesta de la banda de swing formada
sólo por sapos de Franny Robinson. Es el jefe de la pandilla de sapos y,
sin duda alguna, es el más “cool” de todos.
Tiny vino del pasado traído por El Del Sombrero, con el propósito de
capturar a Lewis. Sin embargo, llegado el momento, la combinación de su
enorme cabeza con sus pequeños brazos le impide cumplir con tal misión.
Aunque al principio era bastante feroz, Tiny se convierte en la mascota
de la familia Robinson.
La Feria de Ciencias
La Dra. Krunklehorn es una inventora de Inventco Labs y uno de los
jueces de la Feria de Ciencias de la escuela de Lewis. Su último invento
es el parche de cafeína, que es como tomar doce tazas de café de una
sola vez. Lleva varios días sin dormir.
Coach es el profesor de gimnasia, musculoso y duro como una piedra. Como
la Feria de Ciencias tiene lugar en el gimnasio, se considera calificado
como para ser uno de los jueces.
El Sr. Willerstein es el aparatoso profesor de ciencias que soporta los
experimentos explosivos de Lewis porque reconoce el talento del niño
como inventor y que lo alienta para que se inscriba en la competencia de
ciencias.
Lizzie es una alumna vehemente y de mirada fulminante que participa de
la Feria de Ciencias. Su actitud un tanto siniestra y su terrario de
hormigas coloradas preocupa a los jueces, en especial cuando ella dice:
“Solo pican a mis enemigos”.
Stanley es un alumno entusiasta que se toma su proyecto de ciencia
demasiado en serio. Se viste con una toga mientras presenta su modelo a
escala del Monte Vesubio. Cuando su experimento falla, el profesor de
gimnasia le ordena correr alrededor del gimnasio, hazaña no tan fácil de
realizar para un niño regordete vestido con una toga.
UNA FAMILIA ROBINSON FANTÁSTICA Y FUTURISTA:
LOS ORÍGENES
“El tema de nuestro film podría resumirse en la siguiente frase: ‘Sigue
adelante’”, afirma Steve Anderson, el director de LA FAMILIA DEL FUTURO,
quien durante los últimos años ha estado construyendo el espectacular
mundo del futuro donde la familia Robinson lleva a cabo al máximo los
sueños más alocados, extraños y mágicos. “Al conocer a la increíble
familia Robinson, nuestro héroe huérfano Lewis aprende a vivir para el
futuro, para todas las cosas que se pueden hacer, en lugar de quedarse
fijado en las cosas que no resultaron en el pasado”.
Anderson –quien afiló sus talentos en el departamento de historias de
Disney en éxitos de la animación realizada a mano como Brother Bear y
The Emperor’s New Groov – y su equipo invirtieron sangre, sudor y vastos
terabytes al realizar este ambicioso proyecto digital. Pero Anderson
tenía una singular motivación: hacía mucho tiempo se había enamorado
perdidamente de los personajes de LA FAMILIA DEL FUTURO, tan frescos y
originales que le hacían sentir que podrían dotar de una nueva dimensión
al legado de Disney de memorable narrativa. Desde cuidadoras de
orfanatos, ranas cantantes, excéntricos abuelos, robots que cambian de
forma, hasta héroes aniñados y un malvado bombín, Anderson amaba que
esta historia se atreviera a transitar el territorio entre lo ridículo y
lo sublimemente emotivo. El hecho de que la historia también explorara
el futuro no tan lejano, atestado de la alegría de lustrosos vehículos
burbuja o ingeniosos tubos y máquinas de tiempo que provocaban estragos,
no hacía más que sumar al irresistible encanto de la creatividad.
“Lo que me encanta de los Robinson es que son adultos pero viven con
todo el entusiasmo, el fervor y el desinhibido espíritu de juego de los
niños”, comenta Anderson. “Los Robinson creen que si tienes un sueño,
debes ir tras él. Si quieres usar la ropa del revés, ¿por qué no?; si
quieres ser hombre bala, ¡fantástico! Son muy divertidos porque sus
reacciones son impredecibles, pero también son inspiradores porque viven
sus vidas de maneras inesperadas y hacen lo que nadie hace”.
El notable viaje de Lewis para conocer a los Robinson casi falla, sin
embargo, a causa de una serie de amenazas, desde dinosaurios que viajan
en el tiempo hasta un futuro malvado alternativo, con codicia y mugre. Y
la mayor amenaza es que Lewis renuncie a su sueño de encontrar una
familia y de hacer un mundo mejor. Este tema rector impactó
particularmente en Anderson, ya que él fue adoptado de niño.
“Para mí, recibir el guión fue la más extraña de las experiencias,
porque de inmediato me sentí unido a él. Comprendí a ese niño y todas
las preguntas acerca de dónde venía y por qué había sido abandonado”,
recuerda Anderson. “Me consideré afortunado de recibir un material con
el que podía conectarme tan profundamente. Desde el principio supe que
esto sería mucho más que una historia de un viaje alocado. Mi objetivo
fue siempre hacer que la búsqueda de Lewis del amor y la esperanza fuese
el meollo emocional, así como profundizarla en su totalidad”.
La evolución de LA FAMILIA DEL FUTURO comenzó con el sorprendente mundo
del libro ilustrado de William Joyce, A Day with Wilbur Robinson, el
cual retrataba a una familia sin igual: una familia de inventores y
soñadores disparatados, para quienes lo normal era tener robots, una
rana cantante y un pulpo mayordomo. Aunque el libro ofrecía una historia
muy simple, la verdadera atracción era el mundo creado, lleno de toda
clase de detalles cómicos y sorprendentes que atrapaban a los lectores
de todas las edades.
Originalmente, Disney había adquirido A Day with Wilbur Robinson para
hacer una realización de acción en vivo, hasta que el departamento de
Feature Animation descubrió la historia y su excelente potencial para
combinarlo con los poderes ilimitados e imaginativos de la realización
animada de hoy. El guión convirtió la historia de esta despreocupada
familia en algo completamente nuevo: una aventura de viaje en el tiempo
que se lleva a cabo en solo un día increíble y que le brinda al huérfano
Lewis muchas y diferentes razones para creer en un futuro fantástico al
que casi había renunciado.
“A Anderson le intrigaba el guión inicial: cómo se concebía una
infrecuente imagen de un futuro que estuviera a la altura de este
concepto: “Me atraía la idea de que Lewis viajara a un futuro que casi
nunca se ve: próspero, creativo y optimista. Llega a ver que existe la
posibilidad de que el futuro sea bello y brillante, una visión
verdaderamente esperanzada”.
“EL EXPERIMENTO”:
EL DESARROLLO DE LOS ROBINSON Y DE SU MUNDO
Ahora, Steve Anderson tenía la chance de convertir esa visión del futuro
en un sorprendente universo animado. Para iniciar el proyecto, Walt
Disney Feature Animation le pidió al debutante director que probara algo
tan sin precedentes que simplemente lo llamaron “el experimento”. Así lo
explica Anderson: “El experimento era el de elaborar todo el guión y los
bocetos de historia, desde la A hasta la Z. Es necesario entender que
esto era algo inusitado en Disney. Normalmente, se realiza el boceto de
la historia del primer acto, se toman notas y luego se pasa al segundo
acto. Pero esta vez, en seis meses lo hicimos para toda la película y lo
pasamos a carretes. Era como escalar una montaña gigante, pero nuestro
equipo de historia no tuvo miedo”.
Pronto, los Robinson y todos los mágicos personajes que los rodean
comenzaron a cobrar vida. El equipo comenzó a diseñar con cuidado las
primeras capas de peculiaridades, excentricidades y personalidades
humorísticas que finalmente se agregarían al mundo de los Robinson,
haciéndolas no solo divertidas sino también narrables y llenas de
sentimiento. En verdad, Anderson se comprometió tanto en el proceso de
desarrollo de los personajes que terminó interpretando las voces de tres
de ellos, incluidas la de torpe El del Sombrero, la de la deliciosamente
inusual Abue Bud y la de la diseñadora Prima Tallulah.
En esta etapa, Anderson trabajó estrechamente junto a Don Hall, el jefe
de la historia del film y otro veterano de Disney. Desde el inicio, Hall
rebosaba de entusiasmo: “Nunca vi una película como esta. Es una
experiencia completamente única. Hay muchos elementos familiares de las
películas de Disney en cuanto a la familia, la aventura y la esperanza,
pero la manera en la que se presentan es completamente nueva y
diferente”.
Hall explica cómo el alocado proceso creativo de presentar los bocetos
de historia de LA FAMILIA DEL FUTURO funcionó: “Steve, los muchachos de
la historia y yo éramos básicamente el primer grupo, los que probábamos
millones de ideas. Lo que realmente queríamos era asegurarnos de que
cada uno de los personajes brindara su propio e inolvidable punto de
vista cómico. Ellos tienen su propia y distintiva personalidad, ya que
pasamos mucho tiempo pensándolos, probando y perfeccionándolos”.
Luego de seis meses, “el experimento” llegó a su fin y la prueba fue
verificada. “Cuando le enseñamos los bocetos de historia en carretes al
equipo completo de animación, fue un momento de tensión, pero la
respuesta fue abrumadora”, recuerda Anderson. “En toda mi carrera en
Disney no había experimentado un apoyo tan rotundo para una historia. La
gente se hacía oír y decía: ‘Tienen que hacer esta película’. Nos
sentíamos encantados al ver la cantidad de gente que hoy en Disney ama a
estos personajes tanto como nosotros”.
Anderson reconoce el hecho de haber permitido que el espíritu libre de
los Robinson permeara todo el proceso creativo, alentando a todos los
involucrados a traspasar los límites conocidos. En esta misión, Anderson
contó también con la colaboración de Dorothy McKim, la productora del
film que ayudó a acunar el proyecto desde la página hasta el boceto de
historia, y desde allí hasta la imagen digital del futuro, algo nunca
antes visto. Al igual que para Anderson, conocer a los Robinson fue para
McKim una estimulante experiencia. Dice: “LA FAMILIA DEL FUTURO es una
comedia, pero tiene mucho sentimiento. Lewis y los Robinson son
inventores, de modo que todo lo que realizan es inventivo y eso
contribuyó a que el proceso fuera increíblemente creativo”.
A McKim le gustó en especial el hecho de que esta fuera también una
historia animada con una mezcla de diversión, acción y aventura, y
además una cantidad de sorpresivos giros: “A diferencia de las
tradicionales películas de Disney del pasado, en LA FAMILIA DEL FUTURO
hay algunos ‘guiños’ importantes, como las identidades secretas y las
sorpresas que depara el futuro”.
LA FAMILIA DEL FUTURO halló luego más inspiración, esta vez de John
Lasseter, el nuevo Jefe Ejecutivo Creativo de Disney y de los Estudios
Pixar y pionero de la animación. “John sentó una marca en la narrativa
animada y su aporte contribuyó a que la película fuese más grandiosa, a
que lograra más emoción y más comedia”, dice Dorothy McKim.
Para Steve Anderson, esa mezcla de emoción y comedia emplaza firmemente
a LA FAMILIA DEL FUTURO dentro de la gran tradición de Disney, aun
cuando concibe un futuro digital completamente nuevo. “La fuerza de las
películas de Disney siempre estuvo en los personajes; eso es lo que le
brindaron al mundo” dice el director. “El público se enamora de los
buenos y de los malos porque con todos ellos se conecta. LA FAMILIA DEL
FUTURO tiene esa misma clase de personajes: divertidos, impredecibles,
pero también emotivos y humanos. Creo que esto es lo que el público
espera de Walt Disney: reír, quizás llorar, pero definitivamente esos
personajes nos van a importar. Yo los adoro porque son como mi familia;
no veo la hora de que el público los conozca”.
UN FUTURO SIN IGUAL:
EL ALOCADO DISEÑO DEL FILM
Mientras que LA FAMILIA DEL FUTURO viaja a toda velocidad hacia una
electrizante visión de ciencia-ficción de un futuro que está fuera del
mundo, los realizadores enfrentaron el excitante desafío de hacer de ese
futuro una realidad animada. En su visión artística general del film, el
director Steve Anderson capitalizó varias influencias: “Todo comenzó con
las bellas imágenes y los grandiosos personajes del libro de William
Joyce; luego se agregaron el guión igualmente creativo y todas las ideas
surgidas del proceso de bocetos de historia y de las increíbles
contribuciones de nuestro equipo creativo”, explica. “En cada paso fluía
la creatividad y nosotros continuábamos avanzando. El resultado es un
increíble despliegue de diseños desde un punto de vista verdaderamente
infantil. Se realizaron muchos sueños infantiles: ¿a quién no le
gustaría ir flotando en burbujas?, ¿a quién no le gustaría usar un
sombrero a hélice o tener un robot familiar que realice toda clase de
cosas cool? Este es un mundo que creo que a todos les encantaría
visitar”.
Anderson y el equipo de diseño comenzaron por idear distintas reglas de
diseño para cada uno de los tres momentos de la historia: el Presente,
el Buen Futuro y el Futuro Malvado. Explica el director: “Sabíamos que
necesitaríamos que el futuro donde Lewis conoce a los Robinson
estableciera un franco contraste con el momento en el que Lewis se
encuentra ahora, así que el presente está lleno de formas geométricas
rectangulares, agudas formas y ángulos, mientras que el futuro de los
Robinson es todo curvas y círculos, inspirado en las imágenes suaves,
curvas y placenteras del libro de William Joyce. Y a su vez, en
contraste con estos dos momentos, el Futuro Malvado es realmente muy
malo”.
Como estética rectora, Anderson y su equipo se inspiraron especialmente
en el Futurismo, el movimiento de diseño industrial de los años 30 y 40.
“Todos adoramos el optimismo y el compromiso total para crear algo más
grandioso, lo que se ve en esas imágenes”, explica Anderson. “De allí
tomamos muchas pautas, así como del estilo arquitectónico curvo de los
años 30 conocido como Streamline Moderne, de modo que este excitante
futuro también brinda una sensación de algo divertido y retro. Y esto le
hace eco al tema de la historia, porque estábamos constantemente mirando
hacia el pasado para construir una imagen del futuro”.
Otra influencia igualmente poderosa en el diseño fue la idea de impulso
hacia el futuro que siempre caracterizó a Walt Disney. El film rinde
homenaje a la concreción de Disney del futuro, “Tomorrowland”, a través
de la divertida inversión de “Todayland”.
La vigorosa mezcla visual de lo retro y de lo futurista también se hizo
extensiva a la permanente colección de invenciones, que van desde el
desaliñado Scanner de Memoria de Lewis, un ensamblaje de piezas de
máquina como así también otros objetos como el aro de una canasta de
básquet o la máquina para hacer mantequilla de maní y mermelada del
mundo de hoy; hasta las veredas móviles, monorraíles, tubos para viajar
y los insta-rascacielos del mundo futurista de los Robinson.
Para crear los escenarios y la utilería sumamente innovadores del film,
Anderson trabajó estrechamente junto al director de arte Robh Ruppel,
quien previamente se desempeñó como diseñador de producción en el film
de animación tradicional Brother Bear. Ruppel comenzó su carrera
especializándose en diseño industrial en el Art Center College en
Pasadena (donde también se desempeñó como profesor) y esta vez la pasó
fantástico viajando al futuro con las herramientas digitales a su
disposición. Así lo califica Anderson: “Robh realmente llevó cada
elemento del diseño del film hasta otro nivel”.
Inmediatamente, Ruppel se dio cuenta de que LA FAMILIA DEL FUTURO sería
el desafío creativo de su vida: “En esta historia hay muchos aspectos,
elementos y paletas diferentes. No importa en qué lugar de la historia
te encuentres; siempre está ocurriendo algo visualmente excitante”.
Inmediatamente, Ruppel y Anderson acordaron en que uno de los elementos
visuales más interesantes del film debía ser el propio Lewis. Señala
Ruppel: “Lewis no encaja realmente en el mundo del presente, así que se
destaca por ser lo más brillante. Es rojo, amarillo y azul; siempre
choca con el mundo a su alrededor hasta que llega al futuro, donde sí
encaja. Su mundo del orfanato es un poco claustrofóbico, muy
esquemático, encerrado y ajustado, pero el fututo es abierto, con cielos
azules y una visión limpia y despejada. Las formas cambian de cuadradas
o rectangulares a lustrosas y redondeadas. La paleta también cambia
completamente del presente al futuro: de ser apagada pasa a ser aguda y
brillante”.
Cuando llegó el momento de concebir la ciudad del futuro donde viven los
Robinson, el diseñador tomó claves del libro de William Joyce, así como
de un número de influyentes diseñadores de los años 30, como Raymond
Loewy, el “padre del diseño industrial”, cuyo trabajo abarcó desde
automóviles hasta naves espaciales –y quien vivió de acuerdo a su famoso
principio MAYA: “Most Advanced Yet Acceptable” [“Lo Más Avanzado, pero
Aceptable”]–; Harold Van Doren, quien trasladó las formas de los
rascacielos y los diseños lustrosos y aerodinámicos a objetos cotidianos
como bicicletas y radios; y el prolífico Henry Dreyfuss, cuyos diseños
de avanzada abarcaron desde el primer contestador hasta la aspiradora
Hoover.
“Fuimos muy influenciados por las formas retro-futuristas al crear al
ciudad del futuro y las invenciones hogareñas de los Robinson”, explica
Ruppel, “pero las actualizamos utilizando materiales más nuevos, como lo
que hace Apple, con muchas terminaciones metalizadas e iridiscentes”.
En cuanto a sus foros favoritos, a Ruppel le cuesta elegirlos, pero se
queda con tres: el garaje de los Robinson, el laboratorio de Cornelius y
el Futuro Malvado. “El garaje de los Robinson es como un salón de
exposición de automóviles de los años 50, todo lustroso y con haces de
luz que lo mantienen brillante”, describe Ruppel. “Yo adoro el
laboratorio de Cornelius porque está lleno de fantasía, pero el Futuro
Malvado es también imponente porque realmente supera los límites de lo
usual en un film de Disney. Está muy basado en la visión oscura del
futuro de Doris, así que toda la arquitectura está centrada en el tema
de las formas del bombín. Es un bol de petróleo gigante, gastado y
contaminado”.
Uno de los mayores desafíos para Ruppel fue el de iluminar este
complicado mundo digital, especialmente porque la historia transcurre a
lo largo de un día, desde el amanecer hasta el atardecer, con
progresivas condiciones de iluminación. “Es un poco como trabajar en la
oscuridad cuando se ilumina con herramientas virtuales”, señala. “Es
algo que uno da por sentado en un film de acción en vivo, pero es un
proceso muy desafiante en la animación digital. Realmente estoy muy
satisfecho con lo bien que resultó”.
La visión integrada del diseño fue gratificante para Steve Anderson,
quien cita al Scanner de Memoria como una de sus piezas de utilería
favoritas. Dice: “Da la sensación de que un niño podría inventarlo. Es
muy orgánico, fabricado con objetos encontrados y con un grandioso aire
retro. Lo siento muy cercano por sus ecos emocionales y por todo lo que
significa para Lewis”.
Otro de los diseños favoritos de Anderson transita la línea entre
utilería y personaje: es Doris, el malvado bombín. Explica el director:
“Doris fue una idea que surgió cuando estábamos buscando el motivo por
el que El del Sombrero siempre usaba un bombín. Pensamos en la divertida
idea de un ‘sombrero guardaespaldas’ como otro invento que no funcionó.
Al igual que todos los otros elementos de diseño del film, Doris posee
una razón orgánica para ser como es. La forma sigue a la función en
nuestros diseños, lo cual ayuda a darle a todo un factor cool”.
EL REPARTO CONOCE A LOS ROBINSON:
DÁNDOLES FORMA A LOS PERSONAJES
En el corazón de LA FAMILIA DEL FUTURO está el niño huérfano de 12 años
que es velozmente trasladado de un mundo donde acaba de renunciar a la
esperanza a un mundo donde no solo todo es posible…¡sino que se tiene la
certeza de que va a ocurrir! Este joven héroe viajero del tiempo es
descripto por Anderson como “alguien que piensa diferente del resto del
mundo”.
El principal objetivo de Lewis es encontrar a su familia, razón por la
que inventa el Scanner de Memoria, una notable máquina que permite mirar
al pasado, aunque Lewis luego se dará cuenta de que necesita cambiar de
dirección y apuntar hacia el futuro para resolver su búsqueda. Explica
el director: “Lewis quiere hacer un mundo mejor a través de los
inventos, pero estos son un tanto extraños; no son lo que las familias
que van al orfanato están buscando. La esperanza de Lewis de encontrar
alguna vez una familia, o a su verdadera madre, están a punto de ser
defraudadas hasta que conoce a Wilbur Robinson, quien le restituye la
esperanza en el futuro al llevarlo hasta allí”.
Tanto como al principio de la historia Lewis se siente un excluido,
finalmente podría ser uno de los personajes menos excéntricos de LA
FAMILIA DEL FUTURO, porque está a punto de rodearse de un grupo de gente
que definitivamente ejercita lo “libre” en la libertad de espíritu. Para
darles vida a los personajes marcadamente diversos del film, los
realizadores reunieron a un grupo de actores de todas las extracciones:
tanto nominados al Oscar® como animadores que raramente son escuchados
en la pantalla. Comenta Steve Anderson: “Estoy muy entusiasmado con el
reparto. Tenemos gente con toda clase de formación, con experiencia en
la comedia, en la televisión, en el teatro, en los dibujos animados y
especialmente en la improvisación. Y es por eso que pudimos crear
personajes verdaderamente atractivos. Ellos llevaron a estos
maravillosos personajes más allá de lo que hubiéramos imaginado”.
El reparto incluye a Angela Basset, nominada al Premio de la Academia®,
quien interpreta a Mildred, la dulce y paciente cuidadora del Orfanato
de 6th Street que siempre fue el hogar de Lewis desde que Mildred lo
encontró de bebé en el umbral de su casa. A Bassett le encantó el
enfoque de la historia con tintes cómicos sobre las maravillas de la
familia. “Realmente aprecié esta historia acerca de un niño que busca a
su familia y cómo hay muchas maneras de hacerla”, dice la actriz. “Como
mamá primeriza, me pareció especialmente atractivo”.
Bassett ejercitó todo sus instintos maternales como Mildred. Describe:
“Su ambición, su sueño, su ocupación y su mayor compromiso es
encontrarle a cada uno de los niños del orfanato una familia que los
quiera, que los valore por lo que son y lo aprecien por su propia
individualidad. En el caso de Lewis, sin embargo, esta búsqueda llegó a
un punto muerto, para mortificación de Mildred. Después de todo, ella
ama a todos sus niños, pero en su corazón hay un lugar especial para
Lewis. Entiende que este niño es diferente y cómo se rige por sus
propios parámetros. Creo que ella lo ve como a un pequeño Albert
Einstein”.
Tanto como disfrutó al crear la voz de Mildred, una de las mayores
emociones de Bassett fue ver al personaje cobrar vida en toda su gloria
animada.’”Se la ve fantástica, conmovedora y amorosa. La adoro, con sus
pequeños anteojos y su peinado. Me sorprende lo que se les ha ocurrido a
los animadores para este film”, resume la actriz.
Otra gran estrella que presta su voz a LA FAMILIA DEL FUTURO es Tom
Selleck, ganador del Golden Globe® y del Emmy®, cuyo carisma de tipo
duro combina perfectamente con el optimismo y el genio temerario de
Cornelius Robinson, el consumado inventor y admirado jefe de Robinson
Enterprises, donde se fabrican aparejos que cambian el mundo.
“Si bien es animado, Cornelius Robinson es simplemente un gran
personaje: un brillante y optimista hombre de familia que ha demostrado
que casi todo es posible si pones la mente en ello”, dice Selleck.
“Admiro que sea alguien que sepa qué es lo que cuenta y crea de corazón
en su familia, sin importar lo inusual que esta sea. Para mí como actor,
fue un desafío muy divertido imaginar estar en su mundo”.
Steve Anderson lo describe así: “Tom está simplemente increíble como el
fundador de nuestro futuro”.
A la diversión se le suma el popular comediante, entrenado animador y
autor de libros infantiles Harland Williams, a quien hemos visto en
numerosas comedias en la última década y quien también es conocido por
interpretar al amado personaje de Lug en la realización animada Robots.
Williams hace aquí a uno de los integrantes de la familia Robinson más
complicados (no sólo mecánicamente): el robot hogareño Carl. Para el
actor, “Carl es este robot extravagante, algo inseguro, pero a la vez
autosuficiente. Crea gran cantidad de drama y entusiasmo en la vida de
todos. No es humano, lo que lo hace una especie de excluido, pero
también tiene un verdadero vínculo con WIlbur”.
Williams se divirtió horrores al tratar de imaginar cómo interpretarlo a
Carl: “Para la voz, me inspiré en la idea de que Carl siempre está
entusiasmado y listo para todo. No toma café, pero ha estado tomando
algo de aceite de motores, chico, ¡y eso lo hace un poco híper!”
Hablando de híper, la Dra. Lucille Krunklehorn aporta más comicidad al
film: es una inventora cuyo último aparato es el parche de cafeína que
le provoca el efecto de doce tazas de café ¡De más está decir que no ha
dormido durante días! El personaje es interpretado por Laurie Metcalf,
múltiple ganadora del premio Emmy® y nominada al Golden Globe® y a quien
recientemente vimos en un papel recurrente en el éxito televisivo
“Desperate Housewives”. Su trabajo en la animación incluye la voz de la
mamá de Andy en los clásicos Toy Story y Toy Story 2.
Metcalf se sintió atraída por LA FAMILIA DEL FUTURO luego de enamorarse
de esta familia. “Una de las cosas que me encantaron del guión es la
idea de una familia que celebra el fracaso”, comenta. “La familia entera
rodea a quien haya fracasado en algo e incluso lo celebra, porque se dan
cuenta de que sin fracasos, nunca habrá éxitos. También me encantó cómo
cada uno expresa quién es de manera singular, porque todos somos únicos.
Quería llegar a conocer de verdad a esta familia porque son
hospitalarios y maravillosos”.
Al igual que a la mayoría de los integrantes del elenco, Metcalf se
asombró al ver a la Dra. Krunklehorn en su encarnación animada: “Me
fascinó: no podía dejar de mirarla. Me encantan sus expresiones faciales
y me pareció una actriz sorprendente, gracias al trabajo de los
animadores”.
Entretanto, el papel literalmente apresurado del repartidor de pizza
intergaláctico, el Tío Art, fue interpretado por Adam West, la veterana
estrella del cine y la televisión, muy conocida por su prolongado papel
televisivo de Bruce Wayne/Batman. A West lo impactó el humor del guión.
Comenta: “Me pareció ingenioso, y también una maravillosa historia
familiar. Los Robinson son peculiares, pero también poseen muchas
características de las familias reales”. En cuanto a interpretar a un
hombre que promete hacer una entrega en cualquier punto de la galaxia en
media hora, dice: “Estos personajes son tan interesantes y tienen tanta
inventiva, que mucha gente los va a adorar”.
Ethan Sandler, escritor y actor reconocido por su increíble versatilidad
en las voces – a quien recientemente vimos protagonizar al ADA Jeffrey
Brandau en “Crossing Jordan” – se hace cargo de sonoros personajes en LA
FAMILIA DEL FUTURO: la malvada Doris (quien complota en contra de
Lewis), el Tío Fritz, la Tía Petunia, el Primo Laszlo, el Tío Dmitri, el
Tío Spike y el CEO. Al desplegar tal variedad de sonidos extraños,
ruidos sorpresivos y magníficas formas de hablar, Sandler desarrolló su
propio método para constatar si sus distintas voces funcionaban: “Con
cada una de las voces, simplemente intentaba hacer reír a Steve Anderson:
si reía, entonces yo sabía que debería seguir en ese rumbo”.
Y agrega: “Para mí, los Robinson son como una especie de gran banda de
jazz, de modo que era cuestión de imaginar qué instrumento podría tocar
cada uno. Había mucho de ensayo y error, hasta que a todos les daba un
ataque de risa incontrolable. Los dibujos de los personajes me
provocaban ganas de subir la marca y de estar a la altura de esas caras
tan increíblemente graciosas”:
En cuanto a su descripción de la verdadera villana del film, la
diabólica Doris, “sombrero guardaespaldas” que se sienta en la inepta
cabeza de El Del Sombrero, dice Sandler: “La voz de Doris es mayormente
la suma de los chillidos y sonidos que se me ocurrieron, ¡todos juntos!”
Para interpretar a Wilbur Robinson, el niño del futuro que cambia para
siempre la vida de Lewis, los realizadores eligieron al adolescente
Wesley Singerman, quien previamente había prestado su voz al icónico
Charlie Brown en varias producciones televisivas. Una vez que leyó el
guión, a Singerman le resultó irresistible la posibilidad de conocer a
los Robinson. Así lo resume: “La historia es permanentemente divertida:
tiene acción, amor, comedia… ¡Es imponente!
Wilbur siente tanto entusiasmo por la vida que habla rapidísimo, lo que
le resultó muy divertido a Singerman. “Creo que Wilbur es uno de esos
muchachos que desean que muchas cosas se hagan aquí y ahora. Utilicé mi
voz natural, pero acelerada”.
En cuanto a la familia de Wilbur, Singerman no dejaba de sorprenderse:
“Son extremadamente peculiares y cada uno es fantástico a su manera”,
ríe. “Me encantó ver sus vidas en el futuro ya que son muy divertidos.
Pero también creo que demuestran que si tienes confianza y crees en ti
mismo y en los demás, puedes lograr cualquier cosa”.
Finalmente, también el director Steve Anderson se unió al reparto en el
papel fundamental del patético chico malo, el apropiadamente llamado El
Del Sombrero, quien casi afecta al futuro en su totalidad. Anderson
decidió tomar el papel cuando la voz que desarrolló durante el proceso
de boceto de historia cobró entidad propia. Admite: “No estoy seguro
acerca de la procedencia de esa voz ¡Creo que en parte surge de la ira y
al frustración que siento durante los viajes en automóvil por la mañana!
Esos sentimientos siempre me resultaron graciosos, dado que para mí, la
raíz de la comedia es la angustia. Originalmente le había dado a El Del
Sombrero un acento británico, paro a medida que el personaje
evolucionaba, comencé a volverme atrás, aunque lo que se mantuvo fue su
actitud de bravucón”.
Anderson también aportó al papel mucha de su compasión por ese hombre
que es más tonto que villano: “Siempre amé la mezcla de maldad y comedia
y este chico la tiene a raudales. Pero mientras que el mundo ve la capa
negra, los bigotes retorcidos y las poses de malvado, ese no es él. Por
dentro, creo que es simplemente un chico excitable. Lo veo como a un mal
actor de teatro que sobreactúa con pomposos gestos pero que no convence
a nadie, porque se sabe que eso no surge de su interior. No le sale bien
el personaje. Definitivamente, el verdadero personaje malvado es Doris”.
Es más, para Anderson, El del Sombrero comparte algunas similitudes con
Lewis. Observa: “Normalmente en una película, el héroe y el villano
tienen que aprender lecciones opuestas, pero aquí, tanto Lewis como El
Del Sombrero llegan a ver que tienen que dejar atrás las cosas que no
funcionaron en el pasado, las que les gustaría que hubiesen sido
diferentes, y seguir hacia adelante. Creo que eso es verdaderamente
único”.
Volviendo a su rol de director, Anderson señala que disfrutó de provocar
esa cualidad de sorpresa que buscó en El Del Sombrero en el resto del
reparto: “En nuestro elenco no había temores. Y eso es muy necesario en
al animación porque no se trata de la sutileza sino de gestos
exagerados. Me emocionó que nuestros talentos vocales fueran tan
creativos, y que con sus agregados y su energía aportaran tantas cosas
al mundo de Lewis y de los Robinson”.
LA MÚSICA DE LA FAMILIA DEL FUTURO:
DANNY ELFMAN, RUFUS WAINWRIGHT Y ROB THOMAS.
¡A DIVERTIRSE!
Entre los muchos placeres y encantos de LA FAMILIA DEL FUTURO, uno
encuentra la música original del film, incluyendo una banda sonora con
tendencia pop, canciones del aclamado cantante y compositor Rufus
Wainwright y la estrella del pop que ha hecho cantidades de éxitos, Rob
Thomas, además de una sorprendente partitura sinfónica del dos veces
nominado al Premio de la Academia®, Danny Elfman. El álbum de la banda
sonora, que reúne 8 canciones y 8 partituras seleccionadas con casi
tanta diversidad como la de la propia familia Robinson, contiene el tema
central “Little Wonders” de Rob Thomas al igual que canciones del nuevo
y exitoso grupo de pop y rock The All-American Rejects y el dinámico
cantante, compositor y pianista británico Jamie Cullum, sumados a un
bonus track que ofrecen los Jonas Brothers, un trío pujante de
adolescentes vehementes, junto al siempre innovador grupo de pop They
Might Be Giants.
“Estoy muy entusiasmado con la música de la película”, dice el director
Steve Anderson, “porque agrega todavía más energía y emoción”.
Rufus Wainwright, el canadiense-estadounidense que ha sido premiado como
uno de los más extraordinarios compositores de su generación, recibió el
golpe de suerte que le permitió convertirse en parte del legado de Walt
Disney: escribir canciones para sus filmes. “Tanta gente fabulosa ha
compuesto para las películas de Disney, desde Randy Newman a Elton John
y Phil Collins”, señala, “que hacerlo se ha convertido en algo muy
codiciado y respetado. Me siento honrado de que piensen en mí como
compositor de Disney”.
Wainwright terminaría escribiendo tres canciones, incluyendo el tema de
Wilbur “Another Believer” (escrito con Marius de Vries), la melodía de
la Big Band “Where Is Your Heart At?”, cantada por la estrella del jazz
y del pop nominada al Grammy, Jamie Cullum, y el romántico vals “Motion
Waltz (Emotional Commotion)”. Su inspiración proviene siempre de ponerse
en la piel de la audiencia. “Yo quise hacer canciones que captaran
inmediatamente la atención del público y lo mantuvieran extasiado” dice.
Jamie Cullum se sintió fascinado al interpretar la canción de Wainwright
“Where Is Your Heart At?”, que sucumbe a la influencia del swing de la
Banda de las Ranas de Franny Robinson. “Me encanta esta clase de música
que tiene verdaderas raíces en el pasado pero también el sabor de la
música pop”, dice Cullum.
Quien también hace una contribución musical con el tema "Little Wonders"
a LA FAMILIA DEL FUTURO es Rob Thomas, el cantante y compositor ganador
del premio Grammy® que fue solista de Matchbox Twenty. Thomas no tuvo
necesidad de ver más que unos clips de la animación primitiva del film
para saber que quería ser parte del proyecto: “Nunca imaginé que tendría
la oportunidad de hacer algo como esto”, dice. “Después de ver apenas
unos fragmentos y partes del filme quedé verdaderamente entusiasmado.”
No necesitaba más para inspirarse. “La historia misma me inspiró, con
este huérfano que trata de descubrir quién es él en realidad por medio
de esta fantasía mágica”, explica. “Había una melodía en mi cabeza y
pasó que todo empezó a fluir en conjunto. La canción habla de cómo la
gente puede, a veces, quedarse estancada en un mal momento en que algo
la tira para abajo y cómo puede perder de vista la idea de que otra cosa
tiene que pasar y que esa otra cosa le va a dar vuelta la suerte. Ya se
sabe, la vida tiene sus altos y sus bajos, pero la cuestión es cómo
sacar lo mejor de esos fabulosos pequeños momentos.”
Para Steve Anderson, las canciones le dieron aún más luces y sombras a
la historia de Lewis. “Ya teníamos un plantel muy divertido con esta
Banda de las Ranas, pero yo quería un par de canciones que nos
introdujeran en el mundo interior de Lewis y en sus propias luchas
internas”, dice el director. “Rufus Wainwright empieza por escribir
sobre la búsqueda de una familia y después Rob Thomas sigue escribiendo
que Lewis encuentra a una familia de un modo totalmente distinto del que
pudiera haber soñado. Los temas musicales se convirtieron en una parte
muy importante del trayecto.”
Entretanto, Danny Elfman creó una partitura que compatibiliza
perfectamente con la mezcla de hilaridad y ternura de los Robinson.
Elfman, que ha compuesto decenas y decenas de partituras realmente
destacadas para largometrajes –desde Batman y Spiderman hasta Good Will
Hunting, además de Charlie and the Chocolate Factory o Men in Black y,
por el lado de la animación, desde Nightmare Before Christmas hasta
Charlotte’s Web– encontró que LA FAMILIA DEL FUTURO le daba la
oportunidad de hacer algo totalmente diferente. Lo que vio fue la
posibilidad de retroceder al tipo de partitura caleidoscópica que se
escuchaba en tiempos de los Looney Tunes y las Merry Melodies, llena de
cambios sorprendentes y divertidos en el ritmo, el tono y el estilo,
sumados a la energía propia del jazz de los Robinson, mientras ofrece un
fondo romántico y exuberante al camino de la transformación de Lewis.
Elfman comenta: “De algún modo, yo siempre evité las películas de
animación porque la música puede terminar siendo un poquito tonta o
simplona, pero LA FAMILIA DEL FUTURO no solo me sorprendió por creativa
y disparatada en el mejor de los sentidos, sino también como una
película muy tierna. Eso significaba que yo podía concebir, por un lado,
algo del estilo de Carl Stalling, quien hizo composiciones para los
clásicos dibujitos de la Warner Bros., mientras, por otro lado, podía
escribir grandes temas musicales que se relacionaran con la historia y
el personaje”.
Elfman finalmente desarrolló distintos temas para cada uno de los
personajes principales: un tema tierno y esperanzado para el idealista
huérfano Lewis, un caótico tema latino para los maniáticos Robinson y un
tema más pícaro para Doris, el sombrero bombín; no podía hacer menos, lo
inspiraba el espíritu de los Robinson. “Esta familia está tan por encima
de todo que me sorprendió más que nada por sus movimientos rápidos e
inesperados. Se mueven por todas partes con ese estilo muy Edad de Oro
de la animación, de manera que yo simplemente tomaba uno de los
movimientos del personaje y lo seguía con la música al ritmo de lo que
estaba haciendo”, explica. “Pero también hay una actitud que parece
anticuada –muy divertida– en buena parte de la música, porque Steve y su
gente le dan un particular toque retro-futurista a lo que se ve en el
mundo de los Robinson.”
La partitura que escribió Elfman fue finalmente ejecutada y grabada por
una orquesta de 90 músicos, que incluye no solo cuerdas sino también una
gran cantidad de vientos y un coro completo. “La música coral le da
todavía más color, como un elemento más. Las voces pueden hacer lo que
no puede hacer ningún instrumento”, observa Elfman.
Además de crear la partitura de la película, Elfman colaboró con los
roqueros Nick Wheeler y Tyson Ritter de The All-American Rejects para
componer el vivaz corte "The Future Has Arrived". Interpretada por The
All-American Rejects, la canción mezcla la divertida actitud retro de
las partituras de Elfman con el sonido rock/pop tan finamente generado
por AAR.
Lo cierto es que componer la partitura y "The Future Has Arrived" se
convirtió en un verdadero placer. “He hecho más de 60 películas, pero
sólo puedo pensar en apenas unas 6 que me hayan hecho la tarea tan
fácil”, confiesa. “Trabajar con Steve Anderson y todo el equipo de
creativos en LA FAMILIA DEL FUTURO fue no solo fácil sino también muy
divertido. Es la excepción a la regla y es muy bueno que esto le
recuerde a uno qué fantástico puede ser hacer una película”.
Anderson también se sintió entusiasmado con la colaboración de Elfman. Y
comenta: “Me acuerdo de la primera vez que Danny me mostró un demo. Era
para la escena del sobrevuelo de la Ciudad del Futuro y la verdad es que
yo estaba como hipnotizado por cada nota y mis ojos estaban empañados de
emoción porque todo me parecía perfecto. Eso era exactamente lo que yo
había soñado. Danny tiene la exquisita habilidad de hacer con su música
precisamente lo necesario para enriquecer el momento. Cuanto más
divertida es la comedia, más rápido caen las lágrimas, los momentos de
miedo son más de miedo y todo resulta más profundo gracias a la música
de Danny”.
LA ANIMACIÓN DE LA FAMILIA DEL FUTURO:
LOS PERSONAJES COBRAN VIDA EN LA COMPUTADORA
En 2005, Walt Disney Feature Animation agregó el primer film de
animación por computadora completo a su larga lista de logros
tecnológicos con el debut de Chicken Little. Por primera vez, el filme
colocó las herramientas informáticas en las manos de algunos de los
mayores talentos de la industria. Ellos, por su parte, pusieron en
práctica algunos de los principios más clásicos de animación que usa
Disney, como “achicar y extender”, una técnica que brinda a los
personajes una calidad redonda y vibrante y una movilidad fluida,
adaptados al mundo CG con resultados entrañablemente estrafalarios.
Pero los personajes de LA FAMILIA DEL FUTURO llevarían a los animadores
de Disney todavía más allá y en direcciones totalmente nuevas al
enfrentarlos con una especie que ellos nunca habían animado antes por
computadora: los seres humanos. Los realizadores sabían que eso no sería
más que una transición. Eso sí, hay que tener en cuenta que animar
humanos por computadora de manera que parezcan humanos reales es algo
que, tradicionalmente, ha resultado bastante peligroso y que ha
presentado complicaciones desde el momento en que empezó a intentarse
porque, a pesar de todos los progresos que han hecho las computadoras en
los últimos años, todavía no han conseguido reproducir la increíble
variedad de características humanas. Todo ello significó tener que
comprometerse a fondo, pero, para Steve Anderson, la clave era
simplemente asegurarse, sin importar las dificultades técnicas, de que
los Robinson serían mucho más que dibujitos recortables y se
convertirían en el tipo de gente que la audiencia está acostumbrada a
ver en la pantalla.
El supervisor de animación Michael Belzer, por su parte, también empezó
su carrera en el mundo tradicional de la animación con filmes como The
Nightmare Before Christmas y James and the Giant Peach, pero entonces
hizo una temporada en Pixar, donde dio sus primeros pasos en la
tecnología digital. Para Belzer, LA FAMILIA DEL FUTURO fue una
oportunidad de combinar el viejo arte de Disney con la sorprendente
capacidad de la animación digital, que puede llegar donde nunca antes
había llegado la animación.
“Creo que es muy divertido ser animador”, dice Belzer, “porque estamos
aplicando todas las posibilidades del pasado a estas formas nuevas, y
tuvimos la gran oportunidad de hacerlo en LA FAMILIA DEL FUTURO. La
historia nos encantó, nos inspiró profundamente”.
Belzer supervisó un equipo de 66 animadores y asistentes de animación
por un período de casi tres años. Desde el principio, estuvo
absolutamente consciente de las enormes proporciones de la tarea que le
había sido encomendada. “El desafío más grande consistía en animar seres
humanos”, explica. “Porque vivimos prácticamente en un mundo 3D, y
nuestro cerebros están acostumbrados a eso, el público nota incluso los
detalles más pequeños cuando se trata de personajes humanos, ya sea la
articulación de sus miembros o la manera en que se les mueve el cabello
o en que se les arruga la ropa. En LA FAMILIA DEL FUTURO usamos la misma
tecnología que con Chicken Little, pero para crear un tipo de mundo
animado muy diferente. Y, desde luego, como con cualquier nuevo filme
digital, los artistas buscaron mejorar sus propias técnicas.”
Para Belzer, eso significa profundizar en los detalles más
imperceptibles. “Por ejemplo, pasamos un montón de tiempo agregando
arrugas y una apariencia de textura a la ropa que aparece en el film, lo
que hace que el mundo de la película se vea más palpablemente real”,
dice. “Un área particularmente difícil era la capa de El Del Sombrero,
que se convirtió en un desafío visual porque hay que prestarle una
atención muy especial a la silueta. Por primera vez, les estábamos dando
a los animadores las herramientas digitales para hacer simulaciones de
ropa, por lo que ellos mismos le tenían que encontrar la vuelta al
asunto antes de que se lo pasásemos al departamento de ropa.”
Belzer observa que un área en la que Disney todavía hace las cosas de
manera diferente, incluso en la era digital, es en la de asignarle a
cada uno de los personajes principales un animador supervisor exclusivo.
“Es un modo fantástico de trabajar y fue una de las claves para LA
FAMILIA DEL FUTURO, por el hecho de que tiene muchos personajes únicos a
los que se les puede dar tanta personalidad”, comenta. “De esa manera,
tenemos animadores que entienden verdadera y profundamente quiénes son
sus personajes y cuáles son sus matices más sutiles, animadores que se
van a sentir absolutamente involucrados con cada uno de los aspectos de
cómo se mueve y cómo existe su personaje. Es decir, se logra esa calidad
emocional extra gracias a que ellos viven y respiran a esos personajes.
En suma, el público encuentra que los ‘dibujitos’ son tan divertidos
porque nos los hemos tomado tan seriamente.”
Además de ser supervisor de animación general, Belzer también fue el
supervisor animador del personaje de Carl the Robot, quien emplea más de
600 controles para su vasto catálogo de movimientos. Me encantó trabajar
con Carl”, admite Belzer. “Es un gran personaje para un animador porque
le permite pensar a uno de una manera bastante poco restringida: lo que
me resultaba más divertido de él es que si, de pronto, yo veía que
necesitaba un brazo adicional para sostener algo, se podía hacer ¡que
otro brazo le saliera del pecho! Había un sinfín de ideas con las que
trabajar cada vez.”
Steve Anderson cree que uno de los personajes que presentaron más
desafíos a su equipo fue El Del Sombrero. “Es tan extremo y su diseño es
tan riguroso que se debatió muchísimo sobre cuán lejos llegar con él”,
explica Anderson. “Esto también pasó con Wilbur, quien se mueve por
todas partes como lo hacían los Looney Tunes, con imágenes como
manchadas y borrosas, pero queríamos que el público sintiera exactamente
eso.”
Incluso cuando trabajaba en los detalles de las texturas de los
personajes y también en sus movimientos, Mike Belzer siguió dedicado a
un objetivo fundamental: evocar no los movimientos sino más bien las
verdaderas personalidades y las emociones por medio del modo en que los
personajes se ven y se sienten. “Lo que distingue a esta película de
otras, creo, es la interacción entre los personajes”, dice. “No es una
comedia habitual. Estamos consagrados a ella y nos sentimos conectados
emocionalmente con cada uno de los personajes. Incluso El Del Sombrero,
que debe verse como un villano clásico, tiene su propia historia
individual. Sólo espero que el público se emocione tanto como nosotros
con cada uno de estos personajes.”
Después de entregarse por entero a las debilidades y a los sueños
futuristas de los personajes de LA FAMILIA DEL FUTURO, Steve Anderson se
hace eco de ese sentimiento. “Nunca dudé de la idea de que estos
personajes tienen algo para decir”, afirma. “Hubo un montón de
obstáculos, detalles técnicos y luchas en el camino pero, sea lo que
fuere que estaba pasando, todos nos mantuvimos diciéndonos esa frase
estupenda: sigue adelante, y eso nos mantuvo ‘siguiendo hacia delante’
todo el tiempo.”
LA FAMILIA DEL FUTURO EN DISNEY DIGITAL 3D™:
UN SALTO HACIA ADELANTE DENTRO DEL MUNDO FUTURO DEL ENTRETENIMIENTO
LA FAMILIA DEL FUTURO y su mundo increíblemente imaginativo verán la luz
en el súper sorprendente sistema Disney Digital 3D™ en un número nunca
superado de pantallas –más de 600 en todos los Estados Unidos–, con lo
que marcan el proyecto de filmación en 3D más ambicioso y creativo hasta
el momento
Disney fue pionero del renacimiento de la alta tecnología de 3D con el
debut de Disney Digital 3D™ para el éxito animado Chicken Little.
También fue un enorme triunfo el especial para Halloween, The Nightmare
Before Christmas de Tim Burton, en Disney Digital 3D™. Pero esas
emisiones, aun cuando se convertían en éxitos en algunas ciudades
seleccionadas, ofrecían apenas un adelanto de lo que podía hacer Disney
Digital 3D™. Por eso, ahora, Disney hace una apuesta más fuerte, tanto
en términos de una narración en 3D más sofisticada como en la
oportunidad que se le brinda a una audiencia mucho más amplia de conocer
el estado de la cuestión del 3D por medio de LA FAMILIA DEL FUTURO, una
película más que apropiada para esta clase de entretenimiento con vistas
al futuro.
Lylle Breier, Vicepresidente Sénior de Disney Special Events, dice: “LA
FAMILIA DEL FUTURO es toda sobre el futuro, por lo que resulta natural
que se presente en este nuevo modo de apreciar una película que exige
que uno se meta de lleno en el mundo de la animación y que lo viva como
tal. Este es el futuro como solo Disney lo puede imaginar, y sabemos que
el sofisticado público de hoy quiere efectivamente experimentar el
futuro de un modo completamente actual, lo que se puede hacer por medio
de la inmersión”.
Y prosigue: "Lo que nos entusiasma a todos en Disney es el hecho de que
ya estuvimos en el nacimiento de esto con Chicken Little y ahora, un
tiempito después, vemos un crecimiento astronómico en la cantidad de
cines 3D. El público de todos los estados de los Estados Unidos reclaman
un 3D digital y, por suerte, todos los cines se están encaminando hacia
ello”.
"Nos entusiasma mucho que los realizadores hayan dado un salto de
gigante para producir este film. El Disney Digital 3D™ es ahora más
cómodo, más fácil de ver y más grande y más audaz que nunca. Tiren todas
las ideas viejas que tengan sobre el asunto, anteojos de cartón, ojos
cansados y dolores de cabeza: Disney Digital 3D™ es muy agradable de ver
y ni siquiera te das cuenta del proceso de 3D. De lo que sí te das
cuenta es de que estás inmerso en un mundo increíble con personajes
maravillosos” agrega Breier.
A los amantes del cine siempre les gustó la idea del 3D, pero la
realidad nunca se había puesto a tono con sus propias fantasías sobre el
tema, hasta ahora, en el nuevo mundo del cine digital: finalmente, al 3D
le ha llegado su momento. En general, los filmes en 3D trabajan por
medio de la proyección de una imagen doble: una para el ojo derecho y
otra para el ojo izquierdo, lo que crea una sensación de profundidad
real. Tradicionalmente, esto se conseguía con el uso de dos proyectores.
Sin embargo, Disney Digital 3D™ saca ventaja de la tecnología de
proyección digital y usa un solo proyector, que cambia de una imagen
para el ojo derecho a una imagen para el ojo izquierdo de manera tan
rápida (144 veces por segundo) que el cerebro no puede tener conciencia
de ello. Como usa luz polarizada, las imágenes son más nítidas, más
claras y nos meten tanto en ellas como nada de lo que se hubiera hecho
en la historia del 3D.
Con LA FAMILIA DEL FUTURO en Disney Digital 3D™, el aspecto técnico
también ha empezado a impactar al aspecto creativo. Por primera vez, los
realizadores tomaron el proceso de 3D en cuenta desde el primer momento
en que empezaron a crear la película. “De hecho, escribimos lo que
llamamos un ‘guión de profundidad’ para todo el filme, y en ese guión
señalamos cuánta profundidad íbamos a usar en cada secuencia de la
historia”, explica el Supervisor Estereoscópico de la película, Phil
McNally, cuya dedicación y talento en el mundo de las tres dimensiones
le han valido el sobrenombre de "Captain 3D". “Fue un verdadero salto
hacia adelante, creativamente hablando, dado que podíamos prever la
película entera y usar efectivamente el 3D para realzar la narración de
un modo en que nunca lo habíamos podido hacer.”
Por ejemplo, McNally y su equipo disminuyeron voluntariamente la
profundidad de la dimensión del filme hasta que Lewis llega a la Ciudad
del Futuro, cuando las cosas de pronto revientan de formas y colores
nuevos. “En toda la película usamos más profundidad que la que se vio en
Chicken Little y, en el momento en que Lewis llega a la Ciudad del
Futuro, la profundidad es la mayor que se haya visto jamás”, observa
McNally.
Y para todos los cambios en profundidad, el objetivo fue una refinada
sutileza que no siempre se asocia con el 3D. “La idea es que el público
no tiene que darse cuenta de que hay cambios en profundidad, simplemente
tiene que sentir que está viendo un mundo del futuro más espacioso”,
comenta.
McNally observa que muchas otras áreas también impulsan a los
realizadores a ser creativos. “Hicimos un enorme trabajo con el tema de
las escalas”, cuenta, “desarrollando distintas herramientas para medir a
los personajes y ver cuán redondos o cuán grandes tenían que ser para
que resultaran convincentes. Hemos mejorado, además, las transiciones
que van de toma a toma, de manera que estuvimos a tono con los Robinson
incluso en las escenas más rápidas”.
Y prosigue: "Pero también tuvimos que controlar el marco de la película,
lo que se conoce como la ‘ventana estereoscópica’ en la realización de
filmes en 3D. Por ejemplo, en muchas escenas, dejamos el mundo detrás
del marco para que se sienta ese control, pero entonces, en las escenas
de los dinosaurios, por ejemplo, rompemos ese marco jugando con los
ángulos y haciendo que las tomas se tornen literalmente inestables. Es
algo bastante subconsciente pero verdaderamente efectivo al tratar de
crear una secuencia dinámica”.
Todos estos saltos técnicos se van a sumar a una experiencia mayor, más
brillante y más sutil para el público, pero tanto Breier como McNally
observan que, por solo tratar del tema que trata, LA FAMILIA DEL FUTURO
presentará más cambios notables.
"No hay dudas de que para películas de la talla de LA FAMILIA DEL FUTURO
el 3D digital va a ser un factor fundamental en el futuro”, dice Breier.
"De hecho, LA FAMILIA DEL FUTURO será vista en 3D, por ejemplo, en todo
Manhattan."
Y agrega McNally: "En el futuro, les será permitido a los realizadores
crear películas increíblemente inmersivas gracias al 3D. La clave para
ello es que, con la tecnología que estamos usando en este momento en
Disney, muchas de las limitaciones desaparecen y ya nada es
verdaderamente imposible”.
CURIOSIDADES Y NÚMEROS ACERCA DE MEET THE ROBINSONS
Steve Anderson no solo dirigió LA FAMILIA DEL FUTURO sino que también
prestó su voz al villano El Del Sombrero y a varios personajes más.
El negocio de electrónica donde Lewis adquiere partes de su Scanner de
Memoria tomó su nombre del hijo del director, Jake.
El Scanner de Memoria incorpora partes reconocibles de una aspiradora,
un aro de básquet, una perforadora, una lunchera, un colador, un
reproductor de CD portátil y una botella de gaseosa.
Uno de los inventos más útiles de Lewis es la Fabricadora de
Sándwiches de Mantequilla de Maní y de Mermelada. ¿Sabían que un niño
promedio va a comer 1.500 sándwiches de mantequilla de maní y de
mermelada antes de terminar la escuela secundaria?
Si se intentara utilizar solo una computadora para cargar por completo
MEET THE ROBINSONS, el proceso llevaría 7 millones de horas, ¡es decir,
800 años!
Si se deseara almacenar todos los datos de la producción en típicos
iPods de 60gb, se necesitarían 2.400.
En la película hay solamente seis “niños básicos de fondo”, pero
vestidos y peinados de manera diferente, estos 4 niños y 2 niñas crean
cerca de 50 personajes distintos, incluyendo dos equipos de básquetbol.
La Banda de Ranas de Franny consiste de 27 anfibios entre los que se
cuentan: Frankie, el pianista, el percusionista, el bajo, 5 clarinetes,
4 trompetas, 4 trombones, 6 saxofones y 4 tubas.
En MEET THE ROBINSONS hay animadores que trabajan en el cine desde la
época de Robin Hood (1973) y The Rescuers (1977).
Carl el Robot tiene 613 controles que los animadores pueden manipular
para darle vida.
IR A
REPARTO Y REALIZADORES
|
|