"GUARDIANES DE ALTA MAR"

de Andrew Davis

LA PRODUCCIÓN

“Cuando las tormentas cierran todos los puertos, nosotros salimos. Cuando los huracanes impiden salir a la Marina de los Estados Unidos, nosotros salimos. Cuando el Señor baja desde los Cielos y decide destruir su Obra con vientos que arrancan las casas de la faz de la tierra, nosotros salimos… Si por milagro, usted posee lo necesario para convertirse en uno de nosotros, esta es la oportunidad de vivir una vida de paga magra con la certera posibilidad de morir lentamente de frío, solo en algún lugar del vasto mar. Sin embargo, esta será su oportunidad de salvar vidas.”


De Andrew Davis, el director del clásico de acción y aventuras The Fugitive, llega GUARDIANES DE ALTA MAR, protagonizado por Kevin Costner, Ashton Kutcher y un elenco de estrellas veteranas y novedosas. Esta es una fascinante y emocionante historia de leal coraje y sacrificio altruista, ubicada en el nunca antes visto mundo de los Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera, una raza especial de hombres y mujeres que arriesgan sus vidas en las más grandes tormentas y monstruosas olas al servicio de su lema: “¡Para que otros puedan vivir!” Conocidos ya por la mayoría de los estadounidenses como los inadvertidos, humildes y audaces héroes que salvaron miles de vidas luego de la mortal inundación provocada por el Huracán Katrina, sus vidas y su trabajo en equipo ocupa un primer plano en esta aventura que paraliza el corazón.
Cuando comienza GUARDIANES DE ALTA MAR, el legendario nadador rescatista Ben Randall (COSTNER) es el único sobreviviente de un mortal choque durante una tormenta masiva. Luego del accidente, es enviado contra su voluntad como instructor a una Escuela “A”, el programa de entrenamiento de elite que convierte a los arrogantes jóvenes reclutas en los mejores y más valientes Nadadores Rescatistas. Con dolor y desilusión, Ben se lanza a la docencia de la única manera que conoce: subvirtiendo completamente el programa con sus métodos de entrenamiento absolutamente no convencionales.
Pero Ben comprende perfectamente lo que está en juego: sabe que sus estudiantes algún día deberán tomar difíciles decisiones, al elegir quién morirá y quién seguirá viviendo. Cuando se enfrenta con el orgulloso campeón de natación Jake Fischer (KUTCHER), Ben ve en el joven a alguien con las condiciones para ser el mejor entre los mejores… sólo si puede combinar su talento en bruto con el corazón y la dedicación necesarios, evitando los errores que él mismo ha cometido. Al encabezar su primera y peligrosa misión en las feroces y turbulentas aguas del Mar de Bering en Alaska, Jake deberá poner en práctica todo lo que ha aprendido, al descubrir lo que significa verdaderamente arriesgarlo todo.
El film fue realizado con la cooperación total de la Guardia Costera, con verdaderos héroes rescatistas como asesores y miembros del reparto. Con una producción que constantemente debió luchar contra el clima y los elementos naturales –y que fue diseñada en torno de un masivo e innovador tanque de olas que simuló las salvajes olas del mar abierto– GUARDIANES DE ALTA MAR brinda algunas de las escenas más profundamente realistas de rescate acuático, nunca antes vistas en el cine.
Touchstone Pictures y Beacon Pictures presentan GUARDIANES DE ALTA MAR, dirigida por Andrew Davis a partir de un guión escrito por Ron L. Brinkerhoff –su debut en el cine– y producida por Beau Flynn (The Exorcism of Emily Rose, After the Sunset) y Tripp Vinson (The Exorcism of Emily Rose, After the Sunset). Los productores ejecutivos son Armyan Bernstein (Ladder 49, Air Force One), Charlie Lyons (Ladder 49, Air Force One) Zanne Devine (House of D) y Peter Macgregor-Scott (Under Siege, A Perfect Murder, Batman and Robin, Batman Forever, The Fugitive).
Junto a Kevin Costner y a Ashton Kutcher, el reparto se completa con Melissa Sagemiller (Sleeper Cell), Clancy Brown (The Shawshank Redemption, Carnivale, Pathfinder), Sela Ward (The Day After Tomorrow, The Fugitive), Bonnie Bramlett (The Doors), Neal McDonough (Boomtown, Minority Report), John Heard (In the Line of Fire, The Sopranos, Pollock, The Package), Brian Geraghty (Jarhead, Conversations With Other Women), Dulé Hill (The West Wing, Holes, Edmond) y la debutante Shelby Fenner.
El poder del mar ha sido evocado en GUARDIANES DE ALTA MAR a través de una combinación de innovadora ingeniería y arte, gracias a un creativo equipo con amplia experiencia en filmes de acción y aventura: el director de fotografía Stephen St. John (Holes), el diseñador de producción Maher Ahmad (Fever Pitch, Miss Congeniality 2: Armed and Fabulous, Holes), los editores Dennis Virkler (The Hunt for Red October, The Fog, A Perfect Murder, Under Siege, The Fugitive) y Thomas J. Nordberg (Holes, Any Given Sunday), el coordinador de efectos especiales Scott R. Fisher (Memoirs of a Geisha, The Terminal, Titanic) y el supervisor de efectos visuales William Mesa (Collateral Damage, Holes, The Fugitive, Into The Blue).

PRESENTANDO A LOS HUMILDES HÉROES DEL MAR:
GUARDIANES DE ALTA MAR PONE EN PRIMER PLANO EL MUNDO DE LOS NADADORES RESCATISTAS
Existen en el mundo muchas clases de héroes. Hay conocidos salvadores de vidas que encontramos diariamente –bomberos, policías y médicos–, y luego están aquellos que trabajan en las sombras, que lo arriesgan todo para salvar a personas completamente desconocidas en las circunstancias más extremas e inusuales. En esta categoría están los extraordinarios pero poco conocidos Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera. Estos valientes hombres y mujeres son una elite que posee la fortaleza física y mental poco común como para saltar desde helicópteros hacia las embravecidas aguas o las masivas inundaciones para rescatar a quienes están en peligro, sin importar los costos. Aun cuando públicamente no sean elogiados, la Guardia Costera salva cerca de 5.000 vidas y 2.500 millones de dólares en propiedades por año. Durante la devastadora temporada de huracanes de 2005, rescataron o evacuaron a un número estimado en 33.520 personas en los Estados del Golfo azotados por el Huracán Katrina.
El estricto programa de entrenamiento de los Nadadores Rescatistas es considerado el más duro de todos los programas militares, con cerca de un 50% de deserción. Y para los que permanecen, lo que les espera son peligrosas misiones en las aguas más oscuras, heladas y embravecidas que la humanidad conoce, donde deben luchar contra la desorientación, el agotamiento, la hipotermia y la falta de oxígeno, mientras tratan de ayudar a quienes están varados, en pánico o que han perdido toda esperanza.
En solo 20 años de existencia, el programa de Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera se ha convertido en uno de los más respetados de la actividad militar. El programa fue decretado por primera vez por el Congreso en 1984, luego de que un barco carguero perdiera trágicamente a 31 tripulantes en las aguas tormentosas de la Costa Este, y con sólo un helicóptero de la Marina para asistir el rescate. Desde entonces, el programa de Nadadores Rescatistas –el único de este tipo para varones y mujeres– se ha desarrollado hasta conformar una unidad de primera a la que se acude ante el advenimiento de desastres acuáticos.
Sin embargo, sus códigos de valentía silenciosa implica que sus historias rara vez sean contadas. Muchos estadounidenses jamás los habían visto en acción hasta que las imágenes de los noticieros mostraron los helicópteros cuando rescataban a las víctimas de los tejados y de las inundaciones de New Orleans. Ahora, GUARDIANES DE ALTA MAR narra la historia de un legendario Nadador Rescatista que pasa su antorcha a la generación siguiente y revela el alma de lo que hace tan fascinante esta tarea: el indomable impulso humano de ayudar a los demás.
La génesis del film comenzó cuando el guionista Ron L. Brinkerhoff se inspiró a escribir una película que explorara la esencia del heroísmo, pero con un enfoque novedoso. “Los policías y los bomberos habían sido mostrados una y otra vez, pero el mundo del programa de Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera nunca había sido explorado en la pantalla”, explica Brinkerhoff. “Lo que me pareció más convincente fue que la Guardia Costera es la única rama militar cuyo mandato es exclusivamente el de salvar vidas… no llevárselas”. Luego de iniciar su investigación, Brinkerhoff decidió enfocar su guión en dos hombres: uno, un respetado veterano de famosos rescates ya cerca de su retiro; el otro, un audaz y arrogante joven que comienza su entrenamiento; y explorar cómo la valentía y la sabiduría se ganan a través de sus intensas experiencias. “Al abordar la historia, deseaba de alguna manera deconstruir al héroe de acción por antonomasia”, agrega el guionista; “realzar la entrega física, psicológica y emocional que esta clase de profesión conlleva, así como subrayar los notables sacrificios a los que se ven obligados como seres humanos”.
Muy tempranamente, Brinkerhoff les llevó la idea a los productores Tripp Vinson y Beau Flynn de Contrafilm, quienes coincidentemente habían estado considerando realizar un futuro film acerca del mundo de los Nadadores Rescatistas. “Nos entusiasmaba la idea de combinar dramáticos momentos humanos con un trasfondo de gran acción”, cuenta Vinson, “y también queríamos abordar la cuestión de cuál es la esencia de un héroe, por qué alguien hace esto y cuál es el precio que se paga. Al ver estas cuestiones, estos muchachos parecen aun más heroicos”.
Antes de seguir con el desarrollo, Vinson y Flynn fueron directamente hacia la Guardia Costera para solicitar su bendición, sabiendo que su total apoyo sería absolutamente clave para brindar una autenticidad visceral y un alma a la producción. “Acudimos a la Guardia Costera aun antes que a Disney”, señala Vinson. “La Guardia Costera era integral para esta película y queríamos asegurarnos de que estuvieran por completo detrás de nosotros. Finalmente, nos invitaron a conocer sus instalaciones de entrenamiento, nos ofrecieron su personal, nos ayudaron a adquirir el equipamiento y muchas cosas más. No podría decir lo suficiente sobre su colaboración y su inspiradora función”.
También se unieron al proyecto los productores ejecutivos Armyan Bernstein, Charlie Lyons y Zanne Devine, de Beacon Communications, una de las productoras independientes más exitosas de la industria del cine, con una aguzada visión de material poderoso; y luego, el productor ejecutivo Peter Macgregor-Scott, ampliamente conocido como uno de los más hábiles para manejar producciones complejas, quien previamente había trabajado con Andrew Davis en tres filmes, entre ellos el exitoso The Fugitive.
“Siempre buscamos historias conmovedoras, y cuando llegó este guión, creo que nos conmovió a todos de la misma manera, con su tremendo potencial para ser una gran experiencia en la pantalla”, dice Bernstein. Cuanto más aprendían del programa de nadadores Rescatistas, mayor era su intriga. Señala Charlie Lyons: “Los Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera son una mezcla única de atleta extremo profesional, cirujano, psiquiatra y sacerdote. No solo tienen que decidir a quién salvar, sino que no es infrecuente que administren los últimos sacramentos a las víctimas en el mar”.
Con la cooperación de la Guardia Costera, el guionista Brinkerhoff tenía ahora la chance de sumergirse más profundamente en la comprensión de la vida cotidiana y de las experiencias de los Nadadores Rescatistas. Pasó un tiempo significativo en la Escuela “A”, observando a los jóvenes futuros héroes sufrir el tremendo régimen de entrenamiento. Luego viajó a Kodiak, Alaska, para conocer a tantos Nadadores Rescatistas experimentados cuantos pudiera, y finalmente entretejió sus historias de vida y muerte en el guión final.
Al tiempo, ese guión llamó la atención de un director conocido por su consumada habilidad con thrillers inteligentes, concisos e impulsados por sus personajes: Andrew Davis, entre cuyos trabajos se cuentan entre otros, The Fugitive, la dramática e intensa épica de acción que obtuvo siete nominaciones al Premio de la Academia (incluida la de Mejor Película), Under Siege, A Perfect Murder y la exitosa aventura familiar Holes.
Así describe Davis su atracción por GUARDIANES DE ALTA MAR: “Lo que es único de esta historia es que nos lleva a un mundo que nadie conoce. Nadie ha estado por la noche en el Mar de Bering rescatando gente, saltando hacia olas de 20 pies a temperaturas heladas y salvando vidas, así que esta es una oportunidad única de experimentar algo tan sorprendente”.
Davis también le aporta al film su propia fascinación por el poder y los peligros del agua: “Yo estuve en el equipo de natación del YMCA De South Chicago, fui guardavidas en la Universidad y tengo un velero. Toda mi vida viví cerca del agua… y me intriga mucho lo que significa salir en una tormenta terrible y tratar de sobrevivir”.
Para los productores, no había nadie como Davis con la capacidad de captar la acción de los Nadadores Rescatistas: “La tensión, el drama y el peligro de las situaciones en las que se encuentran estos personajes requerían alguien que pudiera transmitirlo de una manera visualmente espectacular y, al mismo tiempo, la historia necesitaba de alguien hábil con los personajes, las interpretaciones y el drama. Andrew posee ese equilibrio”, afirma Vinson. Y el productor ejecutivo Charlie Lyons agrega: “Lo que hizo Andrew fue crear a un personaje, el océano, junto a Kevin, Ashton y los muchachos de la Guardia Costera”. Davis sabía que se enfrentaría a extraordinarios desafíos técnicos al intentar crear en pantalla las furiosas tormentas y mares que los Nadadores Rescatistas enfrentan. Aunque se deleitaba ante la chance de trabajar con los incontrolables elementos del agua y del clima, el film lo atraía por muchos más motivos. Con un agudo interés en la naturaleza humana, a Davis lo intrigaba especialmente la compleja relación entre el personaje de Costner, Ben Randall, y el autosuficiente pero prometedor estudiante Jake Fischer, interpretado por Kutcher.
“La historia realmente trata sobre estos dos hombres y sobre cómo se pasa el testimonio: los jóvenes reemplazan a las leyendas”, comenta Davis. “Lo que me encantó de la escritura es la honestidad de su relación. Se trata de un hombre frente a la realidad de envejecer y de otro que aprende de su mentor de qué se trata la vida y cómo no cometer los mismos errores. Es el elemento humano en medio de estas increíbles fuerzas naturales lo que hace a GUARDIANES DE ALTA MAR tan fascinante”.
Desde el comienzo, Davis sintió que la clave para hacer una poderosa película sería confiar en la increíble experiencia de la Guardia Costera. Colaboró estrechamente junto a tres Nadadores Rescatistas, leyendas por derecho propio que se desempeñaron como consultores e integraron el reparto del film: el reconocido instructor de la Guardia Costera y especialista en rescate de sobrevivientes Robert E. Watson; John F. Hall, responsable de numerosos rescates post-Katrina; y Joseph “Butch” Flythe, multipremiado nadador y uno de los cinco Nadadores Rescatistas originales elegidos para el programa de la Guardia Costera.
Una vez que éstos supieron que Davis intentaba ser extremadamente preciso en su retrato de la Guardia Costera, estos tres modestos héroes de numerosos rescates se sintieron más que complacidos de brindar sus conocimientos para GUARDIANES DE ALTA MAR. “El compromiso de hacer la película de manera correcta era fenomenal”, observa Watson. “Todos nos preguntaban constantemente si así deberían hacerse las cosas. Fue increíble la forma en la que se esforzaron para representarnos con fidelidad”.
Del otro lado, la admiración fue aun mayor. Dice Andrew Davis: “Estos tres hombres sentaron la marca que Kevin, Ashton y los 22 nadadores de nuestro elenco debieron alcanzar”.

LA LEYENDA VA AL ENCUENTRO DEL NOVATO:
KEVIN COSTNER Y ASHTON KUTCHER ENCABEZAN EL EQUIPO DE
GUARDIANES DE ALTA MAR
Aun antes de completado el guión, los realizadores de GUARDIANES DE ALTA MAR sabían que el destino del film se definiría al elegir a los dos actores adecuados que representaran al veterano Ben Randall y al energético debutante Jake Fischer, quienes, como antagonistas, sacan a relucir lo mejor de sí. Es por eso que los realizadores se sintieron tan gratificados cuando dos de las más grandes estrellas de Hollywood, Kevin Costner y la estrella en ascenso Ashton Kutcher, inmediatamente se comprometieron con la película.
Costner fue una elección temprana del director Andrew Davis, quien así lo caracteriza: “Es perfecto para el papel porque tiene esa fuerza del protagonista masculino combinada con un sensible ser humano, de modo que puede interpretar a un tipo que no solo es duro y capaz, sino que también puede realizar la introspección para ver hacia dónde va su vida”.
Para Costner, cuyos papeles han abarcado desde su apasionado proyecto Dances With Wolves hasta taquilleros éxitos como No Way Out, Bull Durham, Field of Dreams, The Bodyguard o el aclamado drama reciente The Upside of Anger, era difícil resistirse a ese guión. “La excitación de la apertura y la naturaleza conmovedora del final me atraparon por completo”, confiesa el actor.
Costner explica que la “cualidad mística” del guión fue lo que más lo atrajo: “Creo que a todos nos gustaría pensar que si estuviéramos perdidos en el mar, alguien vendría por nosotros, aun en las peores condiciones. Ese es un sentimiento reconfortante, el cual se traduce en una idea heroica o romántica: la noción de que alguien nos rescatará. Y creo que esa es la respetuosa promesa de los Nadadores Rescatistas: cuando los puertos están cerrados, cuando la gente no puede salir, ¡ellos lo hacen! Están dispuestos a poner en juego sus vidas en cualquier momento y me parece que el guionista Ron Brinkerhoff realizó un trabajo estupendo al captar las emociones y las personalidades que subyacen a todas estas cosas. Desde el comienzo de la historia, existe la sensación de cómo sería ser esa persona que ayuda a los que tienen miedo y están perdidos”.
Cuanto más aprendía, más impresionado se sentía Costner ante el programa de la Guardia Costera. “Estos muchachos salen y arriesgan sus vidas por gente completamente desconocida y eso es algo que sólo los seres humanos pueden hacer por el prójimo… Realmente es una de las cosas que nos hacen sentir orgullosos de lo que somos”, afirma.
El personaje de Costner, Ben Randall, es alguien que siempre estuvo en la vanguardia de las misiones de rescate, pero ahora, luego de una terrible tragedia, debe enfrentarse a los cambios en su horizonte. “Ben me recuerda a uno de esos grandes atletas como Michael Jordan, quien constantemente sale de su retiro porque todavía siente el entusiasmo”, observa Tripp Vinson. “Lo único que Ben sabe hacer es rescatar; no puede dejar de hacerlo y seguir adelante con su vida… hasta que se ve reflejado en este muchacho, Jake”.
Agrega Costner: “Ben es un militar. Dicen que los Nadadores Rescatistas no se hacen sino que se los encuentra, y él pertenece a esa raza. Esto es para él mucho más que un trabajo: es una llamada, pero también ha tenido un costo. De modo que cuando lo conocemos a Ben, también vemos a un personaje algo golpeado y quebrado”. A pesar de sus defectos, Ben debe estar a la altura de una nueva e inesperada misión, la de transmitir sus conocimientos a un grupo de reclutas que no tienen ni idea de lo que van a experimentar. “Ben no es un maestro por naturaleza”, admite Costner, “así que sus métodos son bastante poco ortodoxos. Se enfrenta a estos arrogantes muchachos y trata de encontrar la manera de brindarles un fuerte sentido de la responsabilidad”.
El impulso de enseñarles a estos talentosos jóvenes estudiantes llega al punto máximo con Jake Fischer, cuya potencia como nadador es solamente superada por el poder de su confianza juvenil. En GUARDIANES DE ALTA MAR, Costner disfrutó la oportunidad de observar cómo Ashton Kutcher daba vida por completo al personaje de Jake, desde el muchacho rudo hasta el hombre heroico, con sus propios y singulares toques. “Ashton posee la habilidad de percibir las oportunidades dramáticas que no necesariamente están en la página, las mide y las transforma en momentos dramáticos del film; de este modo logra que la película ascienda un nivel”, dice Costner de su co-estrella. Y además de la intensidad psicológica del film estaban los desafíos físicos. A pesar de su amplia experiencia en entrenamiento para filmes de acción, GUARDIANES DE ALTA MAR fue para Costner uno de los más duros. “Este film requirió todas mis habilidades físicas”, admite Costner. “Yo tengo 51 años y los demás muchachos andan por los veintitantos, así que para mí el entrenamiento fue una verdadera tarea voluntaria”. Pero para él valió la pena, sólo para captar la experiencia de los Nadadores Rescatistas que saltan cuando alguien necesita ayuda. “Pienso que no podría hacer lo que hacen ellos, pero creo que este film se percibe como muy realista y nos brinda una aproximación a quiénes son estos muchachos. Nos coloca en su lugar por un estimulante momento”, afirma. Siendo él un premiado director, a Costner le impresionaba realmente la habilidad de Davis al integrar todos los elementos de una producción tan exigente: “Andy logró una gran película de acción en un lapso breve y con un ajustado presupuesto, con muchas circunstancias desafiantes. Como director, yo no podría haber hecho lo que él ha realizado”.
Al igual que Costner, Ashton Kutcher fue instantáneamente atraído por el guión de GUARDIANES DE ALTA MAR y notó que éste ofrecía una oportunidad inusual. “Definitivamente, estaba buscando algo que fuese totalmente diferente de lo que había realizado anteriormente, y esto por cierto lo es”, afirma el joven actor. “Y también la chance de trabajar con actores a los que admiro y de quienes puedo aprender. Este film no sólo me ofreció muchas oportunidades de aprender y de exigirme, sino que también me atrajo por el tema del que se trata: una generación que aprende de la que la precede”.
Kutcher se sintió inspirado para bucear por debajo de las hazañas de los Nadadores Rescatistas. “Los muchachos de la Guardia Costera son la clase de héroes que no hablan de sí mismos”, señala, “y yo guardo un enorme respeto por esa clase de personas”. Por lo tanto, el actor se entregó con total devoción a su papel, sabiendo que tendría que someterse al mismo entrenamiento exhaustivo que realizan los nadadores de la Guardia Costera. “Si iba a realizar un film sobre los Nadadores Rescatistas y a interpretar a esos héroes, quería enorgullecerlos”, afirma. “Definitivamente no deseaba que alguien me doblara. Imaginaba que estos muchachos viven de salvar vidas y, como actor, lo menos que podía hacer era ponerme en forma y ser capaz de interpretarlos”.
Muy pronto, el actor se vio junto al resto del reparto en un agotador y exhaustivo campamento de entrenamiento que pondría a prueba su decisión. “El campamento con los profesores de la Aviación Técnica de Supervivencia fue una experiencia inolvidable”, recuerda. “Nunca en mi vida había recibido tantos gritos de alguien a quien respeto, con excepción quizás de mis padres. Estos muchachos nos hicieron mover, ¡y de manera muy dura! En el verdadero estilo de entrenamiento de la “Escuela A”, los instructores nunca les piden a los alumnos que hagan algo que ellos mismos no hacen, así que si te gritan para que hagas 40 ó 50 flexiones, ellos las hacen contigo. Así que uno siente por ellos el mayor de los respetos”. Como resultado final, Kutcher logró cumplir con todos los requerimientos de un Nadador de la Guardia Costera mucho antes del fin del entrenamiento –incluyendo pruebas de velocidad, fuerza y resistencia– y sus instructores señalaron que parecía poseer lo necesario para unirse a ellos. Irónicamente, el mayor desafío para Kutcher al comienzo fue su falta de confianza en el agua. “En verdad, al agua no me gusta”, ríe. “Es decir, si me arrojan a una piscina, no me voy a ahogar, pero este es un tipo de natación muy diferente. Lo más difícil para mí fue simplemente zambullirme cada mañana. Sin embargo, estaba feliz de estar en un tanque de olas y no en el océano abierto: si algo salía mal, me podían sacar”.
A Andrew Davis lo impresionó la devoción de Kutcher por su papel. “Realizó un trabajo estupendo para esta película. Necesitábamos encontrar a un chico con espíritu, mundano, capaz de llevar el distintivo de un gran Nadador Rescatista… y así era exactamente Ashton”, describe. “Creo que aumentó entre 10 y 15 libras de puro músculo durante el entrenamiento”.
Y continúa el director: “Tanto Ashton como Kevin aportaron muchísimo en términos del desarrollo de Ben y de Jake. Como director por derecho propio, el sentido de Kevin del timing y del personaje ha sido un elemento importante en la evolución del guión; y Ashton es muy inteligente y un gran improvisador, con un tremendo sentido del compromiso”.
Una vez en el foro, trabajando en arriesgadas secuencias y en confrontaciones emocionales, Costner y Kutcher desarrollaron un estrecho vínculo que parecía imitar el de sus personajes. Así lo resume el productor Vinson: “El verdadero premio al elegirlos a Kevin y a Ashton fue la química que existió entre ambos. Probablemente haya sido lo que más me entusiasmó de esta película. Creo que realmente van a sorprender al público”.


LA ZAMBULLIDA: EL REPARTO VA A UNA ESCUELA “A”
Junto a Kevin Costner y a Ashton Kutcher, GUARDIANES DE ALTA MAR cuenta con un elenco diverso que conforma a los 22 reclutas de la Escuela “A”, un grupo compuesto no solo por jóvenes actores sino también por varios nadadores olímpicos, atletas de triatlón y verdaderos Nadadores Rescatistas. “Realmente me superé para asegurarme de que eligiéramos a verdaderos nadadores”, cuenta Adrew Davis, “y al mismo tiempo, crear una gran mezcla de tamaños, géneros y personalidades en la clase. Con tantos consumados atletas y miembros de la Guardia Costera en el elenco, los actores realmente se esforzaron para tratar de estar a la altura de ellos”.
A fin de preparar más al elenco para los excepcionales rigores y peligros de los simulados rescates acuáticos, aquellos que interpretaban a los Nadadores Rescatistas y a los aprendices se embarcaron para asistir a un breve pero definitivamente extremo curso de la Escuela “A” dictado por Robert Watson, John Hall y Butch Flythe, de la Guardia Costera. Andrew Davis señala que sólo estar en presencia de los verdaderos Nadadores Rescatistas fue una inspiración constante: “Tienen una manera determinada de andar, un sentido de la disciplina y una visión general de la vida que son simplemente fantásticos. Nos sentimos bendecidos de contar en el foro con gente que de verdad salva vidas y que nos retroalimentó”.
El elenco estaba entusiasmado, pero sintió el peso considerable de emular el heroísmo de los hombres y mujeres que estaban interpretando. Dice Brian Geraghty, la joven estrella que interpreta al desaventajado aprendiz “Hodge”: “Sabíamos que los muchachos con quienes estábamos trabajando habían salvado muchas vidas, y eso te pone mucha presión para hacer las cosas bien… Pero, chico… ¡este entrenamiento era ridículo! He practicado surf toda mi vida y adoro el agua, pero tanto física como mentalmente, esto era durísimo, incomparable con nada”.
Butch Flythe señala: “Sometimos a los actores a lo que llamamos el Curso Liviano de Nadador Rescatista, pero de todos modos era muy intenso. Trabajaron increíblemente duro… Y si mirabas a la piscina en cualquier momento, no podías darte cuenta de que esta no era una clase real de la Escuela ‘A’, ¡lo cual nos impresionaba mucho!”
Aun cuando muchos de los actores de GUARDIANES DE ALTA MAR habían estado en campamentos de entrenamiento para el cine, nada parecía compararse a este. “Fue una grandiosa experiencia porque nos unió muchísimo”, dice Tripp Vinson. “Tuvimos un reparto muy atlético, todos estaban tremendamente cansados al final y eso nos enorgullecía verdaderamente”.
El asesor técnico de la Guardia Costera Jeffrey D. Loftus cree que el exigente entrenamiento ayudó tanto al elenco como a los realizadores a tomar más riesgos creativos: “Con la presencia de los verdaderos nadadores, el entrenamiento y la exposición a las técnicas de rescate, lograron llegar mucho más lejos. Tuvieron verdaderas oportunidades de ver las cosas que un nadador experimenta, algo que la gente común ni siquiera imagina. Creo que esto los ayudó a representar realmente el profesionalismo, la dignidad y el honor que distinguen a los Nadadores Rescatistas”.
Para el Nadador Rescatista Robert Watson, la experiencia de trabajar en una producción de un film de Hollywood fue igualmente esclarecedora: “Como Nadadores Rescatistas, llegamos con nuestras percepciones de Hollywood, pero descubrimos que Kevin, Ashton y el resto del elenco son verdaderamente honorables. Tenían por delante un trabajo y lo querían hacer bien. Nosotros nos entrenamos muy duro para trabajar y fue estupendo estar junto a otros profesionales que también pusieron alma y vida en lo que hacían”.
En tanto, al explorar el mundo de los Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera, GUARDIANES DE ALTA MAR también muestra el efecto resonante de este trabajo en las vidas y las relaciones personales de los nadadores. Estas circunstancias emergen a través de dos de los personajes femeninos del film: Helen, la frustrada esposa de Ben Randall interpretada por la popular estrella del cine y la televisión Sela Ward; y Emily, el reciente interés amoroso de Jake Fischer, interpretada por la estrella en ascenso Melissa Sagemiller, quien recientemente llamó la atención en la serie “Sleeper Cell” de Showtime.
Ward estaba emocionada de reunirse nuevamente con Andrew Davis, ya que anteriormente había interpretado a la esposa de Harrison Ford en The Fugitive. “Realmente deseaba volver a trabajar con él y nunca lo había hecho con Costner, así que me pareció que sería muy divertido. El papel de Helen tenía lo suficiente como para mostrar algo especial y hacer que cada escena tuviera su peso”.
Ward la ve a Helen como “un mujer muy fuerte y artística a quien la vida en Kodiak, Alaska, poco puede ofrecerle”. Y continúa: “Creo que Helen pensó que ella y Ben compartirían grandes planes, pero ahora, con las exigencias del trabajo de él, lo ve demasiado poco. Son realmente dos personas que deberían estar juntas, pero que se han apartado”. A pesar de ser realista acerca del costo de esa carrera para las familias y los matrimonios, Ward también desarrolló un inmenso respeto por los Nadadores Rescatistas en el curso de la producción. “Realmente tienen la habilidad humana de entregarse por el prójimo”, observa. “Y ese es el corazón de esta película”:
A Sagemiller también la conmovieron los verdaderos Nadadores Rescatistas, y Emily, su personaje, al comienzo se siente afectada por las bravuconadas de Jake Fischer. “Emily es maestra de escuela, muy práctica y explosiva, que cuando conoce a Jake le parece encantador pero un presumido, de modo que no se siente tan impactada por él”, ríe Sagemiller. “¡Piensa que él tiene que trabajar mucho en sí mismo!”
Y continúa la joven actriz: “Enseguida hay entre ambos una intensa química, mucho juego de idas y venidas en el cual constantemente se van midiendo, pero a lo largo de todos estos juegos, se enamoran por completo”.
A medida que su relación se profundiza, la honestidad de Emily para con Jake se convierte para él en algo invalorable: “Emily puede ver a través de Jake, mientras que él no siempre puede ver a través de su propio ego lo que ocurre con él y su lucha”, comenta Sagemiller. “Ella le brinda a él esa especie de punto de vista de intuición femenina que él realmente necesita. Es un personaje realmente divertido y picante de interpretar”.
Trabajar junto a Ashton Kutcher fue un enorme regalo para Sagemiller: “Es increíblemente divertido y espontáneo”, afirma. “Siempre está haciendo bromas, con gran energía y magnetismo. Enseguida congeniamos… y fue grandioso ver su intenso compromiso con su personaje”.
El elenco femenino se completa con la estrella de la canción de los años 60 Bonnie Bramlett en el papel de Maggie, la viuda dueña del bar que está íntimamente vinculada con la Escuela “A”; y con Shelby Fenner, una entusiasta novata que participó en “C.S.I.” y en “Charmed” en televisión, quien se hace cargo de un papel de acción como Cate Lindsey, una de las reclutas femeninas en la Escuela “A”. Fenner tenía curiosidad por aprender en el programa de Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera, el único “abierto a todos los géneros” de este tipo ya que permite el ingreso de mujeres, siempre que cumplan con los requerimientos físicos. Ahora tuvo el honor de unirse a Ashton Kutcher y al resto de los hombres en el entrenamiento de la producción en el desafiante campamento, así como de interpretar a una de las pocas y excepcionales mujeres que actualmente trabajan como Nadadoras Rescatistas.

HACIA EL DESPIADADO MAR:
EL DISEÑO DEL INNOVADOR TANQUE DE OLAS DEL FILM
Cuando la producción de GUARDIANES DE ALTA MAR se puso en marcha, los realizadores se encontraron en una posición poco común: la de luchar contra severas condiciones meteorológicas –incluidos los efectos posteriores de los huracanes y las erupciones volcánicas– y simultáneamente diseñar la manera creativa de recrearlas.
No bien leyó el guión de GUARDIANES DE ALTA MAR, el director Andrew Davis supo que sería un serio desafío. Después de todo, ¿cómo lograr exactamente realizar un film en una locación completamente imposible de filmar como las aguas letales del Mar de Bering? “Me preocupaba mucho cómo íbamos a simular el Mar de Bering, cómo hacer del océano un personaje fascinante”, explica el director. “Ese era el gran interrogante”.
Para encontrar las respuestas, Davis acudió a dos de sus antiguos colaboradores: el diseñador de producción Maher Ahmad, quien supervisó la creación del tanque de olas sin precedentes del film y los foros subacuáticos; y el supervisor de efectos William Mesa, cuya inventiva generó en la computadora algunas de la imágenes de tormentas en el mar más realistas alguna vez vistas en cine. “William Mesa y Maher Ahmad fueron claves para imaginar cómo crear un mundo acuático realista”, afirma Davis. “Vimos el material más estrafalario de verdaderas tormentas y de escenas de rescate y, sorprendentemente, ellos lograron algo igualmente poderoso”.
Peter Macgregor-Scott agrega: “William Mesa creó los aviones de guerra en Under Siege, la persecución en tren de The Fugitive, y ahora, las tormentas de GUARDIANES DE ALTA MAR, todos con un increíble realismo”.
Por su parte, Ahmad estaba emocionado de reunirse otra vez con Davis, y también lo entusiasmaba especialmente hacerse cargo de un diseño que en definitiva combinaba innovadora ingeniería con el arte de las antiguas películas: “Fue muy divertido porque logramos crear cosas que generalmente no se hacen en las películas. Normalmente, uno diseña el interior de cocinas o salas de estar, pero aquí diseñamos vastos entornos acuáticos: cavernas, botes y el mar abierto”.
El motivo central del diseño era el “foro” más vital del film: el tanque que serviría como océano virtual en las secuencias de acción de mayor suspenso del film. Su creación resultó ser una increíble aventura: “He realizado muchos filmes de envergadura, pero este tanque es verdaderamente espectacular y único”, describe MacGregor-Scott. “Es el único de su tipo en el mundo”.
Cuando el tanque estaba recién en su etapa inicial, la ironía del destino quiso que una verdadera y monstruosa tormenta se abatiera sobre la producción de GUARDIANES DE ALTA MAR. Con el rodaje originalmente planeado para realizarse en New Orleans en 2005, la producción se vio obligada a realizarse en Shreveport, Louisiana, luego del ataque del Huracán Katrina, el cual destruyó gran parte de la ciudad. “A pesar de tener que rodar con todos los cambios, seguíamos sintiendo que no podría haber otro lugar mejor que Louisiana para filmar una película sobre los Nadadores Rescatistas, especialmente luego del Katrina”; afirma Tripp Vinson.
Entonces fue el turno de Ahmad de empezar a reconstruir el tanque de agua en un sitio que todavía se recuperaba de sus propias necesidades de rescate. “Urgentemente tuvimos que contratar a nuevos ingenieros, hallar nuevas locaciones, trabajar con nuevos contratistas y comenzar realmente desde cero bajo la enorme presión del estrés y del tiempo… Sin embargo, al final resultó muchísimo mejor que lo que esperábamos”, resume Ahmad. “Requirió la habilidad de una enorme cantidad de gente”.
La base del tanque de agua era una piscina de concreto de ocho cámaras de 100 x 80 pies, capaz de contener ¾ de millón de galones y construida delante de una pared azul de 50 pies. Para asegurar la más completa seguridad técnica y la autenticidad, Ahmad convocó a un grupo de ingenieros (en suelos, civiles, mecánicos y eléctricos) para que todo funcionara correctamente.
Y entonces llegó el momento crítico: generar las olas de entre 6 y 9 pies, con espuma y blancas crestas. Para la creación de la máquina de olas, la producción trajo a la firma Aquatic Development Company (ADC), con base en Nueva York, la cual diseñó un novedoso sistema de motores de 150 caballos de fuerza con ventiladores que producían la suficiente presión de aire como para crear verdaderas olas oceánicas, una tras otra. El efecto total de las olas surge cuando impactan en la parte de atrás del tanque, con un movimiento de rompiente con la próxima ola, creando así un constante movimiento de ondulación igual al del océano.
“Con frecuencia, ADC ha creado tanques de olas para parques de diversiones, pero nunca antes habían hecho algo así, donde las olas debían ser terriblemente fuertes y revoltosas. Para ellos era un territorio desconocido”, cuenta Ahmad. “Fue gratificante el día en que vimos lo maravillosas que eran las olas. Parecía un crudo día de invierno en el Mar de Bering… ¡y las olas eran tan fuertes que realmente algunos de los dobles de riesgo sintieron náuseas!
El tanque de agua superó las expectativas de todos. Davis recuerda: “Lo estupendo fue que cuando el Nadador Rescatista de la Guardia Costera Robert Watson vio las olas, dijo: ‘¡Se me pone la piel de gallina porque es tan real!’ Y otro detalle sorprendente era que constantemente podíamos sintonizarlo para lograr distintos modelos, alturas y frecuencia de olas. Básicamente, podíamos decidir qué tipo de olas deseábamos para cada escena”.
Una vez que el tanque estuvo en funcionamiento, Maher Ahmad comenzó a diseñar los foros principales que se ubicarían dentro del tanque: la caverna, el bote de pesca y la sala de máquinas. Uno de sus mayores desafíos fue la creación de la caverna marina, donde se desarrolla una de las escenas de rescate más desesperantes del film. “La caverna debió ser construida por completo fuera del tanque y luego transportada por dos grúas gigantescas de 150 toneladas y colocada en el agua”, explica Ahmad. “Además, debía soportar la fuerza de las olas de seis pies, de modo que para que fuese liviana pero resistente, utilizamos una espuma de alta densidad, esculpida a mano como roca y recubierta con una gruesa capa de plástico en spray. El resultado fue un éxito: lucía impresionante”.
Para el bote de pesca, la producción había comprador inicialmente un pesquero de 72 pies al sur de New Orleans… y todos quedaron anonadados al ver que el lugar donde habían realizado la compra había desaparecido del mapa por acción de Katrina. Ahora tenían que encontrar la manera de transportar el bote hasta Shreveport, atrapado entre los desechos en Lake Ponchartrain. Fue una tarea nada fácil –un viaje de 800 millas remontando el Río Mississippi– y ese sólo era el comienzo. “Una vez que llegó a Shreveport, quedaba mucho por hacer”, recuerda Ahmad. “Tuvimos que reconstruirlo en gran parte, reacondicionar los aparejos para darles lugar a los dobles de riesgo y finalmente recubrirlo con pintura que simulara un envejecido”.
Y el toque final: el bote fue montado en una plataforma neumática que mecía la estructura para imitar el golpe de las olas. En estas secuencias, se lanzaban enormes cantidades de agua desde 35 pies para simular más olas, que empapaban el foro y a los actores. Y para subrayar aun más la atmósfera acuática, Ahmad utilizó gigantescos ventiladores para crear fuertes vientos y lluvias.
Otro foro complicado fue la sala de máquinas, donde Jake queda atrapado. “El foro completo debió ser construido de modo que funcionara aun cuando estuviera empapado”, explica Ahmad, “y esto presentó desafíos que al principio no hubiésemos imaginado, por ejemplo, la iluminación, la cual debía ser completamente a prueba de agua. ¡No queríamos electrocutar a nadie!”
Finalmente, el tanque de agua brindó al elenco y al equipo la sensación personal de cómo sería trabajar con intensos fríos y humedad durante horas y horas. Y también les trajo recuerdos a los verdaderos Nadadores Rescatistas. “Una de las escenas más duras fue cuando Randall fantasea con ser atrapado en la red”, admite Butch Flythe. “Fue una escena verdaderamente tenebrosa porque el miedo de todo Nadador Rescatista es: ‘¿Saltaré hacia algo de lo que no podré librarme?’ Me dio verdaderos escalofríos”.
Eso era exactamente lo que esperaban los realizadores. “Nunca ha habido una película en el Mar de Bering porque no se justifica pagar para ir allí y luego meterse en problemas”, señala Scott. “Pero cuando nuestros instructores y asesores de la Guardia Costera nos dijeron que nuestra recreación era sorprendentemente adecuada, sentimos que eso era muy significativo”.
Todos los integrantes del equipo experimentaron una sensación de aventura, en especial el fotógrafo Stephen St. John, cuyas cámaras fueron intencionalmente colocadas lo más cerca posible de la acción, a fin de que el público sintiera que estaba allí, en el agua junto a los personajes. “La premisa básica fue que queríamos lograr realismo”, dice Vinson. “Si la película era granulada, estaba bien; si había gotas de agua en las lentes, también, porque así son las cosas en una verdadera situación de rescate”.
A fin de agregarle más autenticidad al film, la segunda unidad viajó a la escarpada costa de Oregon para filmar en acción a los verdaderos Nadadores Rescatistas de la Guardia Costera, cuando saltan desde los helicópteros hacia las olas. Luego viajaron a Alaska para captar vistas aéreas de la Isla de Kodiak, donde una reciente erupción volcánica creó nuevos desafíos. En tierra, Ahmad creó detalladas replicas de los helicópteros Jay Hawk de la Guardia Costera, desde los cuales los Nadadores Rescatistas saltan para llevar a cabo sus acciones de rescate. También diseñó la Escuela “A” en el interior de varios edificios vacíos en una base de la Guardia Nacional, comenzando desde cero pero intentando lograr la atmósfera precisa de la escuela suprema de la Guardia Costera en Elizabeth City, North Carolina. Otros pocos días de filmación tuvieron lugar en Elizabeth City, a fin de captar la atmósfera de una gran estación aérea de la Guardia Costera.
Pero el alma del film son las escenas acuáticas, porque es en esos momentos cuando los personajes son puestos a prueba hasta lo más profundo. En la post-producción, las secuencias acuáticas cobraron verdadera vida gracias al trabajo creativo del supervisor de efectos visuales William Mesa. “El desafío fue crear océanos realistas que se integraran con los entornos tanto reales como digitales del film”, dice Mesa. “Hay escenas con muchas capas, muy complicadas, con botes que se hunden, objetos que explotan y el enorme mar que estalla por sobre todo”.
Mesa trabajó extensamente con el tanque de olas, de modo de poder tomar metraje de las olas allí creadas y literalmente “darles forma” en el amenazante mar de 30 pies de profundidad al cual se aventuran los Nadadores Rescatistas. Mesa admite que el trabajo con agua puede llegar a ser una pesadilla digital, pero él realizó un abordaje original que brindó asombrosos resultados. “Probablemente el agua sea uno de los objetos generados por computadora más difíciles, porque es orgánico”, explica. “Una verdadera tormenta es tan compleja que realmente no puede ser programada, de manera que la mayoría del metraje de tormentas visto en películas recientes repite una y otra vez los mismos modelos. Lo que yo hice, que es único, fue animar sobre la superficie de verdaderas tormentas y así nuestra filmación se ve mucho más real”.
Quizás los desafíos de GUARDIANES DE ALTA MAR hayan sido interminables, pero más allá de lo que enfrentaron el reparto y el equipo, sabían que nunca se podrían comparar con lo que soportan los Nadadores Rescatistas para salvara a aquellos en extrema necesidad. Simplemente, aspiraban captar algo de la fortaleza y la compasión humanas en acción. “Teníamos con nosotros en el foro a personas que rescataron a víctimas del Katrina, y cuando uno escucha sus historias, los ojos se llenan de lágrimas”, resume Davis. “Estos muchachos son lo verdadero, con gran humildad y lealtad mutua… De eso se trata esta película”.
 

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