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Bajo la forma de una brillante
comedia de costumbres, el realizador MICHAEL LEHMANN (The Truth About
Cats & Dogs, 40 Days and 40 Nights, Heathers) reúne a la gran DIANE
KEATON junto a tres de las mejores actrices de la actualidad, MANDY
MOORE, LAUREN GRAHAM y PIPER PERABO, para explorar los vericuetos del
amor maternal y el momento en que es necesario cortar el cordón.
Daphne Wilder (DIANE KEATON, Alguien tiene que ceder, La joya de la
familia, la trilogía El Padrino) es una madre soltera cuyo amor no tiene
límites ni fronteras. Como ha podido, se las ha arreglado para criar a
tres fantásticas chicas – la adorable Milly (MANDY MOORE, Un amor para
recordar, Saved!, próximamente License to Wed), la inalterable psicóloga
Maggie (LAUREN GRAHAM, vista en la popular serie televisiva Gilmore
Girls, próximamente en Evan Almighty) y la sensual e irreverente Mae (PIPER
PERABO, El gran truco, Coyote Ugly) - para que sean la clase de mujer
que toda mamá se moriría por tener de hija. Para evitar que la más
joven, Milly, cometa los mismos errores sentimentales que ella, Daphne
decide encontrarle el hombre perfecto, pero el detalle que decide no
contarle a Milly es que para eso ha puesto un aviso en Internet. Así
como sabe qué ropa le queda bien, o qué carrera le conviene a su hija,
Daphne está convencida de que si hay alguien que sabe lo que necesita su
hija de una relación seria es ella. Por supuesto, se desata una
verdadera revolución cómica cuando esta bienintencionada madre continúa
haciendo lo indebido, aunque por buenas razones¬…todo en nombre del amor
y de su adorada hija.
¿Será el hombre de los sueños de Daphne (¿o Milly?) el sólido arquitecto
Jason (TOM EVERETT SCOTT, Saved, Cosas que importan), o el roquero
libertario Johnny (GABRIEL MACHT, El buen pastor ,El discípulo)? Daphne
continuará presionando, sugiriendo y persuadiendo a Milly en cualquier
decisión que tome para que corrija todos los errores que ella ha
cometido en su propia vida, o bien hasta volverla loca.
Pero una vez que el propio padre de Johnny, Joe (STEPHEN COLLINS, Blood
Diamond, 7th Heaven), hace revivir en Daphne la chispa del amor, las
cosas comienzan a caldearse en el matriarcado Wilder. Finalmente,
dándose por vencida, Daphne se pregunta si no estará presionando a sus
hijas para escapar de sus propios asuntos.En una divertidísima batalla
de voluntades encontradas, la dinámica madre-hija es puesta a prueba en
su feroz y absurda complejidad. Ahora, las chicas harán todo lo posible
para ayudar a Daphne a encontrar la clave de la verdad y de la
dificultad del amor materno…mientras tratan de responderse preguntas
como : ¿dónde comienza el amor y dónde debería terminar?
PORQUE YO LO DIGO tiene fotografía de JULIO MACAT (Wedding Crashers,
Bringing Down the House), diseño de vestuario SHAY CUNLIFFE (What a Girl
Wants, The Family Stone), diseño de producción de SHARON SEYMOUR (Duets,
Friday Night Lights), montaje de PAUL SEYDOR (Guess Who, Tin Cup) y TROY
TAKAKI (Hitch, Stick It), sonido de DANA SANO (Monster-In-Law,
Magnolia), y música de DAVID KITAY (Bad Santa, Date Movie).PAUL BROOKS (My
Big Fat Greek Wedding, The Wedding Date) y JESSIE NELSON producen la
película, que tiene guión del propio NELSON con KAREN LEIGH HOPKINS (Welcome
Home, Roxy Carmihael, Stepmom).Los productores ejecutivos son, entre
otros, SCOTT NIEMEYER, NORM WAITT y MICHAEL FLYNN.
SOBRE LA PRODUCCIÓN
Una idea “madre”: Nace Porque Yo Lo Digo.
La idea de Porque Yo Lo Digo comenzó con una rutinaria cita con el
dentista. La coguionista Karen Laigh Hopkins estaba en la sala de espera
cuando escuchó de otros pacientes la historia de una madre que estaba
orgullosa de conseguirle citas a su hija con hombres que ella
consideraba que valían la pena.
“El concepto me pareció fascinante”, recuerda Hopkins. “Era una madre
desesperada por ver a su hija casada, pero veía que ésta tomaba malas
decisiones en lo que a hombres respecta. En nombre del amor, decidió
tomar cartas en el asunto y buscar descaradamente potenciales candidatos
para su hija en Internet…sin que si hija lo sepa. Pensé que con ese
punto de partida las posibilidades que se abren para una película eran
ilimitadas”.
En esa época, Hopkins estaba trabajando con la codirectora y productora
Jessie Nelson (quien, como las Wilder de la película, tiene dos
hermanas) en otro proyecto. Una vez que entre las dos desarrollaron la
idea y le dieron forma, se dieron cuenta del rumbo que debía tomar su
creatividad y sus esfuerzos.
Nelson comenta, “Todo el mundo tiene madre, y aunque toda relación
madre/hijo es única, no tengo dudas de que cualquier madre quiere ver a
sus niños saludables, felices, exitosos y enamorados de la persona
indicada. Las posibilidades cómicas de la madre entrometida son
infinitas, y para mejor apoyadas en hechos reales. En aspectos como
este, cada persona tiene algo para contar; por eso que el proyecto
despegó tan rápido apenas empezamos a trabajar”.
Al escribir el guión, las autoras solo querían que el público viera
reflejadas en él sus vidas. Nelson continúa: “Esta es una película sobre
personajes que no son perfectos, que aprenden, crecen y se chocan unos
con otros a medida que avanzan. Pero que, al final del día, se aman
intensamente. Hay cierta comicidad en la dinámica familiar. Si se van
quitando una a una las capas de una familia, en el interior siempre
encontrarás un núcleo de comedia negra. Se trata de lo loco que es el
amor – el amor maternal, el amor fraternal, el amor romántico. Es algo
desordenado e imposible, y eso es lo que lo hace tan increíble”.
Luego de leer el guión de Nelson y Hopkins, Paul Brooks, presidente de
Gold Circle Films, firmó el ingreso de su compañía para desarrollar,
financiar y producir el proyecto de Porque Yo Lo Digo, con la
distribución de Universal Pictures. “El guión me pareció muy gracioso,
cálido y atrapante”, dice Brooks. “Yo tengo una esposa y una hija, y la
relación entre ambas me fascina. La dinámica es tan diferente de la de
los hombres. Creo que las mujeres se identificarán inmediatamente con
esta película, y los hombres que tienes esposas, madres e hijas
reconocerán mucho de lo que sucede…y hasta quizás la película sirva para
que empiecen a entenderlas mejor!”
Ya en plena preproducción, el equipo comenzó a buscar un director con
las sensibilidades requeridas para contar la historia. Y encontraron a
Michael Lehmann, cuyos trabajos anteriores incluyen al clásico de culto
Heathers y comedias románticas tales como 40 Días y 40 Noches y La
verdad acerca de perros y gatos. Como Brooks, Lehmann quedó intrigado
con la dinámica del vínculo madre/hija aprovechada por el guión.
“Obviamente, yo nunca había experimentado directamente esta clase de
relación”, dice, “pero tengo dos hermanas, una esposa y una hija, así
que estuve expuesto a eso durante toda mi vida. Sé que es una relación
increíblemente cargada, y pensé que esta historia la representa muy
fielmente.”
Con el director escogido, Gold Circle estaba ahora lista para elegir a
los actores. Todo lo que necesitaban era tres actrices aptas para
encarnar sendas hijas hermosas y talentosas, y una gran figura para el
papel de una madre tan adorable y aún sexy como exasperante.
Keaton y sus Nuevas Hijas: la
elección del elenco
Fortuitamente, las hijas pasaron a jugar un papel importante en el
proceso de selección de los actores. La coguionista y productora de la
película, Jessie Nelson, conoció a Diane Keaton en el jardín de infantes
de Los Angeles al cual asistían las hijas de ambas. “Nos hicimos amigas,
y nuestro punto de contacto fue la maternidad”, recuerda Nelson. “Fueron
nuestras hijas las que nos juntaron. En el corazón de mi relación con
Diane está el amor que sentimos por nuestros hijos. Así, es
particularmente satisfactorio explorar juntas ese territorio en una
película”.
Nelson le habló a Keaton del guión que había escrito con su compañera, y
la actriz pidió una copia. Luego de leerlo, aceptó protagonizar esta
nueva versión de la madraza clásica, que esta vez se llamaría Daphne
Wilder.
Nelson y Hopkins sabían que habían hallado en Keaton la verdadera
encarnación de Daphne. Y afortunadamente también encontraron en ella una
sólida colaboradora, Hopkins recuerda las observaciones de la actriz al
guión: “Los aportes al guión de Diane fueron apasionantes; ella estaba
muy metida en la historia. Además, es un ser humano extraordinario e
increíble, dedicada a muy diversos intereses. Es miembro del
Conservatorio de Los Angeles, es fotógrafa, y brillante directora. Por
supuesto, es madre también. Sus observaciones fueron muy pensadas, y
ella sabe es muy consciente no sólo de lo que hace, sino de lo que es
capaz de hacer”.
Por su parte, Keaton se identificó instantáneamente con Daphne. Luego de
leer el guión, la actriz quedó fascinada con la simpática locura de esa
madre que intenta manejar las vidas de sus “nenas”. Famosa por elegir
papeles que le permiten demostrar su timming para la comedia, y sus
dotes para el drama, el rol parece caerle a Keaton como anillo al dedo.
Michael Lehmann subraya que la estrella encontró inmediatamente el
espíritu de Daphne. “Estaba claro, por el modo en que fue concebido el
guión, por cómo estaban escritos los personajes, que todo encajaba en
función del humor y la cadencia de Diane. Era perfecta. Cuando la
escuchamos leer sus líneas por primera vez, todos sentimos que esa era
la entrega que esperábamos de una actriz como ella, pero Diane lo
superó”.
Una vez que Keaton ingresó al proyecto, se presumía como razonablemente
fácil el hecho de encontrar una suma de talentos ansiosos por trabajar
con la ganadora del Oscar. Los creadores se dispusieron entonces a
buscar un trío de jóvenes mujeres para interpretar a las hijas de Daphne
–Milly, Maggie y Mae. A la vez, con un personaje tan fuerte como el de
Daphne, no iba a ser fácil dar con tres personalidades igualmente
magnéticas y con las cuales la gente pudiera identificarse, que tuvieran
química como hermanas y resultaran creíbles como hijas.
“Primero encontramos a Milly”, dice Nelson. “No queríamos elegir a las
otras hermanas hasta que no supiéramos quién iba a hacer de Milly. Mandy
Moore entró, hizo una excelente lectura y reinventó a Milly. Tiene una
hermosa pureza y vulnerabilidad, y pensamos que sería interesante que
personaje fuera por ese camino”.
Moore admite que quería el personaje estrictamente por Keaton: “Tener la
posibilidad de trabajar con ella en cualquier nivel es increíble”, dice.
“No es que simplemente la influencia de trabajar con Diane mejore tu
actuación; es algo que sucede automáticamente estando al lado de ella.
Yo serviría el catering, me encargaría del maquillaje o de los peinados
con tal de estar en una película con ella”.
La actriz, además, valoró mucho la honestidad del guión en cuanto a la
relación madre/hija. “Daphne y Milly me recuerdan mucho a mi relación
con mi mamá”, reflexiona Moore. “A veces me vuelve loca, pero al final
del día…somos mejores amigas y nos adoramos”.
Cuando
Moore ya había sido elegida como Milly, los creadores comenzaron a
buscar a la actriz justa para encarnar a la hermana mayor, Maggie.
Nelson dice, “cuando Lauren Graham se embarcó en el proyecto, supimos
que sería un buen contraste con el personaje de Milly, que es muy
emocional y expresiva en sus sentimientos. Maggie es muy ocurrente, y
además una mujer práctica y energética, de esas que te convencen de que
pueden encarar cualquier cosa, y Lauren encajaba perfectamente.
Lauren Graham, quien dedicó buena parte de su trabajo de la última
década a su interpretación de Lorelai Gilmore en la serie televisiva
Gilmore Girls, conocía bien el campo de la compleja dinámica familiar.
Ella, al igual que Moore, estaba ansiosa por trabajar con Keaton. La
actriz dice “Quieres que tu personaje esté a la altura del increíble
genio y talento de esa mujer. Diane es muy vivaz, y muy atenta a todo”.
La siguiente elección, para el papel de la hermana del medio, Mae, fue
la versátil actriz Piper Perabo. “Piper trajo una cualidad diferente a
este grupo de mujeres, y sabíamos que iba a funcionar”, dice Nelson.
“Cuando ella se incorporó al proyecto, quedó conformada una familia
hermosa e interesante, que supimos podríamos llevar con éxito a la
pantalla”.
Lo más sorprendente para Perabo fue la camaradería que encontró en sus
compañeras de rodaje, Moore y Graham. “Siempre reíamos y charlábamos
hasta que comenzaba la acción”, dice. “Cuando Michael gritaba ‘Accion’,
aún estábamos riéndonos de nuestras bromas fuera de cámara como uno
haría con sus hermanas”.
Lo que también llamó la atención del elenco femenino formado para la
familia Wilder fue el nivel del diálogo que se plantea entre las mujeres
de la historia creada por Hopkins y Nelson. Porque Yo Lo Digo está
colmado de charlas sobre sexo, maridos, novios, compras y el poder de la
mujer. El hecho de que las actrices se hayan conectado también fuera del
set hizo que las escenas resultaran aún más orgánicas.
En particular, las escenas subidas de todo fueron especialmente
sorprendentes. Dice Mandy Moore, riendo, “Normalmente no hablo tan
abiertamente con mi mamá o mis amigas de cosas como la anatomía de los
hombres y cosas así…, no como lo hacen estas mujeres. Pero creo que es
divertido enterarse en un película de lo que otras mujeres suelen
hablar, y el tipo de lenguaje que utilizan”.
Una vez resuelto el problema de las mujeres del elenco, los creadores
debían elegir los actores para los principales personajes masculinos,
Johnny y Jason, los diametralmente opuestos pretendientes de Milly, los
cuales dan lugar a un sinfín de críticas y comentarios de Daphne. El
equipo quería actores que pudieran complementarse con las fuertes
figuras femeninas sin perder la presencia de sus personajes.
Michael Lehmann explica: “Apenas me involucré en la película, pensé que
el mayor desafío en cuanto a la elección del elenco iban a ser los
personajes masculinos, porque están tan bien definidos como los
femeninos. El sexo masculino aparece bastante en la película, de una
manera crucial en la historia. Aunque está en un segundo lugar en
comparación con las chicas. Quería estar seguro de que tendríamos
actores con la fuerza suficiente como para encarar esos personajes”.
Gabriel Macht fue el elegido para interpretar al bohemio y seductor
Johnny, a quien Daphne devalúa diciendo “tiene la palabra trampa escrita
en la frente”. Dado que inicialmente la madre cree que Johnny no es
bueno para su hija, en su actuación Keaton debía mostrarse
suficientemente fría y hasta cruel con Gabriel, lo cual, según
observaron los creadores, fue una de las cosas más difíciles para la
actriz.
“Él fue la primera persona que evaluamos para el papel”, dice Lehmann,
“y Gabriel dio en el clavo con el personaje”.
Macht estaba ansioso por trabajar con Lehmann. “Michael dirigió una de
mis películas favoritas, Heathers, y varios episodios de The Larry
Sanders Show; creo que es un genio”, dice el actor. “Conoce bien la
comedia, sabe hacer reír. Y yo respondo bien a su dirección”.
Para el personaje de Jason, el pretendiente más conservador y estricto,
el equipo comenzó la búsqueda con la mente abierta, dispuesto a probar
muchos actores “Tom Everett Scott no fue la primera persona que
probamos, pero sí fue quien se perfiló más fielmente para el personaje”.
“Me pareció que era importante que Jason no fuera sólo una mala
persona”, continúa Lehmann.” Eso hubiera sido demasiado simplista, y
nada congruente con la realidad. De haberlo hecho como un tipo tan
negativo, Milly no tendría ningún dilema en cuanto a qué decisión tomar.
Queríamos que Tom hiciera un Jason amable, comprensivo, y que pese a
todo no resultara la elección correcta para Milly. Tom encontró un buen
modo de hacerlo, nunca adoptó pose de villano.
Scott concuerda con la evaluación que Lehmann hace del personaje. “Creo
que me eligieron porque querían que la audiencia sintiera que Milly
podría terminar con este chico. Y de repente es una sorpresa que no
resulte”.
Finalmente, los creadores llamaron a Stephen Collins para interpretar al
atractivo Joe, el padre de Jason, y nuevo interés romántico de Daphne.
Collins, conocido por su participación como el reverendo Eric Carden en
la serie 7th Heaven, también ha sido visto en Diamante de sangre junto a
Leonardo DiCaprio. Pero quienes conozcan bien la filmografía de Diane
Keaton, lo recordarán por su interpretación del testarudo y bromista
esposo del personaje de Keaton, Annie Paradis, en The First Wives Club.
Sobre su decisión de aceptar el personaje, Collins dice: “¿otra
oportunidad para besar a Diane, y que me paguen por eso? Anótenme”.
Notas desde el set
El rodaje principal de Porque Yo Lo Digo comenzó el 5 de diciembre de
2005, en diversas locaciones de Los Angeles, California. El equipo
zigzagueó por todo el sur, desde el Japanese American National Museum –
donde Milly conoce a Jason en un cóctel donde ella se encarga del
catering - y las colinas del Benedict Canyon –donde Milly y Jason
comparten una noche romántica en la casa del arquitecto - hasta la
ciudad costera de Venice, donde está ubicada Good Enuf to Eat (la
empresa de catering de Milly), convirtiendo así a media Los Angeles en
el escenario de la película. El otro pretendiente de Milly, Johnny, con
su pequeño hijo, también vive en el distrito de Venice. Su negocio de
música está ubicado en la floreciente zona Tagle Rock, cerca del lago
Silver.
El loft de MIlly fue construído en el centro de Los Angeles, y las
Wilder son sorprendidas en la enésima excursión de compras en Neiman
Marcus del Boulevard Wilshire, en el corazón de Beverly Hills. Las tomas
del negocio de Daphne fueron rodadas en locaciones de la ciudad de
Brenwood, mientras que su acogedora casa estaba ubicada en la zona
Hancock Park.
Para balancear las interminables charlas del elenco femenino que se
daban reiteradamente en el set (todo para ponerse en la piel del
personaje, por supuesto) de Los Angeles, el elenco tuvo la oportunidad
de compartir una experiencia enriquecedora, y que sirvió para fortalecer
aún más la camaradería: cantarían todas, y en escena. En dos de los
momentos clave de la película, las mujeres Wilder se improvisan como
cuarteto.
“La música es una parte muy importante de la película”, comenta Lehmann.
“Yo sabía desde el principio lo bien que cantaba Diane (recuerda la gran
interpretación –que hizo con Bette Midler y Goldie Hawn- de “You Don´t
Own de Leslie Gore en El Club de las divorciadas), así que buscábamos la
manera de incorporar eso a la película. Debatimos bastante acerca de qué
tipo de música debíamos incluirr. Cuando elegimos a Mandy, el hecho de
que ella fuera una gran cantante fue un bonus extra”.
En la audición de Lauren Graham, Lehmann y los productores comprobaron
exultantes que ella también podía cantar bien. Graham había formado
parte de un grupo a capella en la secundaria y sabía que podría manejar
sin dificultades las partes musicales de la película; estaba muy
entusiasmada al respecto. “Uno de los números es una armonía a cuatro
voces, lo cual no es nada sencillo”, Graham recuerda “fue divertido,
porque fui a un estudio de grabación y canté las canciones en vivo. Eso
es otra cosa que me encanta de las películas –que un personaje de
repente irrumpa cantando, sea eso justificado o no”.
“No se si le preguntamos Piper si podía cantar o no” continúa Lehmann
“Como ya teníamos dos o tres buenas cantantes en el grupo, ya estábamos
satisfechos. Cuando tuvimos la sesión de grabación para la primera
canción, apareció Piper y encajó justo, lo hizo maravillosamente bien”.
En materia de canto, Moore, que en este grupo de novatas es la
profesional experimentada, quedó impresionada por el talento de sus
compañeras. “Todas cantan bastante bien” dice. “Bromeábamos sobre hacer
un cuarteto de chicas y llevarlo a la calle ¡Soy tan sentimental para
esos momentos de canto en las comedias románticas! Me alegra que en esta
película no haya uno, sino dos”.
Pero, cuando no están en el escenario, las mujeres Wilder deben volver
al trabajo. Mientras Maggie se mantiene bastante ocupada como psicóloga
y Mae mete su nariz en todo embrollo que ande cerca, Daphne trabaja en
forma independiente haciendo tortas, y Milly en la mencionada empresa de
catering. Como los lugares de trabajo culinario de Daphne y Milly son
elementos clave del guión de Hopkins y Nelson, el equipo rápidamente se
dio cuenta de que debería consultar a profesionales para que los
asesoraran en los momentos más “sabrosos” de la película.
Encontraron lo que necesitaban en los profesionales de The Cake Divas,
empresa que entró al proyecto gracias a la recomendación de uno de los
encargados de utilería del film, quien había trabajado en un proyecto
anterior con ellos. Dirigida por los famosos Leigh Grode y Joan Spitler,
The Cake Divas es desde 1998 una de las más requeridas compañía de
postres a pedido de Los Angeles; y ha creado desde entonces una gran
variedad de tortas diseñadas especialmente para numerosas películas y
programas de televisión. Originalmente, estos expertos en dulzuras
varias fueron contratados simplemente para hacer las tortas; pero luego
de varias charlas en relación al personaje de Keaton, los creadores le
pidieron a Spitler que fuera el “doble de cuerpo en decoración” de
Keaton para las escenas en que Daphne debe demostrar sus habilidades
para el glaseado. Luego, le pidieron también a los Divas que
interpretaran a los asistentes de Daphne.
“El dilema en lo que hace a las tortas en la película es expresar en
ellas el estilo de Daphne” dice Spitler. “Leímos el guión, lo revisamos
e hicimos bocetos para cada torta, de manera de que pudiera reflejarse
en ellas cada personaje principal de la película”.
En absoluta armonía, y al cabo de muchas porciones de torta de The Cake
Divas, las Wilder se despidieron de la filmación el 3 de febrero de
2006. “La pasamos muy bien” recuerda Graham. “ Todo el rodaje fue como
una interminable reunión festiva de mujeres, con todos los clichés en
los cuales una habitualmente no quiere caer. Básicamente, hablábamos de
hombres y compras todo el día”.
Además de incluir ingredientes como humor, romance, sexo, número
musicales y pastelería, el corazón de Porque Yo Lo Digo trata de la
fuerza universal más fuerte de todas: el amor maternal.
La productora y coguionista concluye: “A Diane, Karen y yo nos encanta
la línea del guión en la que Daphne dice que la maternidad es un amor
imposible. Una quiere mantener a sus hijos eternamente cerca y a salvo
de cualquier daño. Pero como madre una sabe que es sólo golpeándose que
los hijos aprenden a defenderse solos”.
PORQUE YO
LO DIGO – Título original: BECAUSE I SAID SO – Año:2007 –
Duración: 102 min.aprox – Compañía Productora: GOLD CIRCLE FILMS
Dirigida por MICHAEL LEHMANN
Guión: KAREN LEIGH HOPKINS & JESSIE NELSON
Producida por PAUL BROOKS & JESSIE NELSON
Productores Ejecutivos SCOTT NIEMEYER, NORM WAITT, MICHAEL FLYNN
Fotografía JULIO MACAT, ASC
Diseño de Producción SHARON SEYMOUR
Montaje PAUL SEYDOR, ACE, TROY TAKAKI, ACE
Vestuario SHAY CUNLIFFE
Co-Productor WENDY RHOADS
Música DAVID KITAY
Supervisor de música DANA SANO
Casting EYDE BELASCO CSA
Productor Asociado KAREN LEIGH HOPKINS
Manager de Producción MICHAEL FLYNN
Primer asistente del director MIKE TOPOOZIAN
Segundo asistente del director MICHAEL A. MCCUE
Productor asociado JONATHAN SHORE
Elenco
Daphne DIANE KEATON
Milly MANDY MOORE
Johnny GABRIEL MACHT
Jason TOM EVERETT SCOTT
Maggie LAUREN GRAHAM
Mae PIPER PERABO
Joe STEPHEN COLLINS
Lionel TY PANITZ
Eli MATT CHAMPAGNE
Derek COLIN FERGUSON
Stuart TONY HALE
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