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TÍTULO ORIGINAL: MON PETIT
DOIGT M’A DIT
Basada en la exitosa novela BY THE PRICKING OF MY THUMBS de AGATHA
CHRISTIE, dirigida por PASCAL THOMAS, con un elenco extraordinario
encabezado por ANDRÉ DUSSOLIER y CATHERINE FROT, y precedida por un
extraordinario suceso de taquilla en toda Europa (más de un millón y
medio de espectadores sólo en Francia), llega ahora LA DESAPARICIÓN DE
MADAME ROSE (MON PETIT DOIGT M’A DIT), un nuevo y delicioso laberinto de
suspenso, intriga y crimen, motorizado por una encantadora y
estrambótica pareja de sabuesos, Belisaire y Prudence, casi una
multiplicación por dos de otro de los célebres héroes de AGATHA CHRISTIE,
el fabulosamente sagaz Hercule Poirot.
Prudence
y Belisaire Beresford son una pareja otoñal pero aún sensual, e
inequívocamente refinada, surgida de la prodigiosa imaginación de AGATHA
CHRISTIE, para la cual Prudence era uno de sus personajes favoritos. Con
un pasado no tan olvidado, que los ha visto vinculados a los servicios
secretos, Prudence y Belisaire están muy bien entrenados para el
peligro, y no le temen a la aventura. Aunque, de los dos, es Prudence
quien experimenta la mayor nostalgia por sus días de gloria. Cuando
arranca LA DESAPARICIÓN DE MADAME ROSE, los vemos en plena visita de
cortesía a la caprichosa y anciana tía Ada, quien transcurre su vejez
plácida en un elegante hogar de ancianos, y por lo visto absolutamente
decidida a no dejarse abatir por un final amargo. Sin embargo, estamos
en el mundo de AGATHA CHRISTIE. El cielo se oscurece. Un enrarecido aire
de misterio empieza a
teñir
la acción. La tía muere en circunstancias por lo menos curiosas; y lo
mismo sucede con otro de los ancianos residentes. En seguida, Prudence
descubre que la sorpresiva partida del lugar de una misteriosa anciana,
con quien ella ha mantenido un sugestivo diálogo circunstancial, se
parece demasiado a una desaparición involuntaria. Y decide lanzarse a
investigar. Pertrechada en su perfecta elegancia y en su inagotable
ironía, Prudence se sumerge en las aguas recelosas de este nuevo
misterio, con Belisaire no demasiado convencido, pero siguiéndola muy de
cerca. Juntos van a descubrir un terrible secreto, oculto tras la
belleza cegadora de los Alpes.
“En oportunidad de sus sucesos tempraneros en los 70, PASCAL THOMAS fue
rápidamente catalogado como uno de los nuevos realistas del cine
francés, heredero de la tradición de RENOIR y VIGO, con algo del
espirituoso hedonismo de JACQUES ROZIER, otro poco de las tendencias
autobiográficas de FRANÇOIS TRUFFAUT y algo del cruel naturalismo de
MAURICE PIALAT. En LA DESAPARICIÓN DE MADAME ROSE, el más reciente de
sus films, tan soberbiamente dirigido, ha decidido explorar un
territorio cinematográfico situado a años luz de los cimientos
etnológicos de sus comienzos, y a la vez tan ajeno y distante de las
modas, usos y costumbres de nuestra época.
Así como en LA DILETTANTE, THOMAS le entregaba a su público un estudio
sutil e irónico de la sociedad francesa en sus diferentes estratos, bajo
la forma de una fábula moral, en LA DESAPARICIÓN DE MADAME ROSE toma una
novela de AGATHA CHRISTIE y convoca exitosamente el espíritu de la
famosa autora, sin caer en la trampa de las adaptaciones abrumadas por
las convenciones de la reconstrucción histórica, de las ideas
preconcebidas y los clichés. La campiña francesa reemplaza a Escocia, el
nombre
de
la heroína (Prudence) podría ser tanto de origen francés como inglés,
mientras que el de su marido es definitivamente francés (Belisaire). A
la vez, es imposible situar con precisión la localización temporal de la
acción dado que, al igual que en LA DILETTANTE, el diseño de producción
y el vestuario lucen bastante atemporales, pese a que en el film se
desliza como sin querer una vitriólica alusión a la ola de calor que no
hace mucho azotó Francia, y también una ironía burlona sobre los
ringtones de los celulares.
Esos detalles levísimos establecen, ya desde los planos iniciales, un
cierto hiato temporal entre el film y el mundo real. Y esta
característica no hace sino acrecentarse a medida que en el film crecen
los giros, meandros y vueltas de tuerca argumentales, bajo la forma de
una pesquisa encantadoramente tortuosa, que obedece a la lógica
inherente al relato, antes que a la credibilidad mundana. Así, la
originalidad del film reside en la importancia que otorga a diferentes
registros de lenguaje, siempre elaborados, y disparadores de una
diversidad de diálogos y de situaciones cómicas como muy pocas veces se
da en un mismo film: ironías, aforismos, citas, chicanas, retruécanos...
Hay en LA DESAPARICION DE MADAME ROSE una suerte de intoxicación del
lenguaje, una delectación en la palabra hablada que encarna en todo el
brillante elenco, encabezado por CATHERINE FROT y ANDRÉ DUSSOLLIER, y
esta diversidad lingüística encuentra resonancia en la estructura del
film, que armoniosamente combina varios géneros: la comedia, desde
luego, en casi todas sus formas ( enredos conyugales, burlesque, musical
), el suspenso, la fantasía y el melodrama. Y es en esta dimensión donde
el film es más audaz; una audacia que se ve todavía más destacada por la
gradual penetración de una atmósfera intranquilizante, como de sueño,
alimentada por personajes por demás misteriosos y por mórbidas
revelaciones ( que se inician con el descubrimiento de una antigua
pintura ) que remiten al Gótico hollywoodense.
En
este muy disfrutable thriller de misterio, la sombra de la muerte
sobrevuela la acción casi desde el comienzo y, en contraste con los
radiantes Prudence y Belisaire Beresford, hacia el final se nos revela
la presencia de otra pareja, que es como un reflejo especular de ellos,
deformado y descompuesto. Pero por sobre todo, LA DESAPARICION DE MADAME
ROSE es un film sobre las delicias de la vida en común, sobre la
felicidad de poder envejecer juntos de dos personas que se aman, sobre
el egoísmo esencial, infantil, que define a los amantes de todas las
edades. Como buen amante del cine, además de cineasta, PASCAL THOMAS
rinde tributo a algunos de los grandes, desde SACHA GUITRY a JOSEPH
MANKIEWICZ, de una manera luminosamente natural, en ningún momento
presuntuosamente reverencial..
Devoción por la palabra hablada ( en su contenido, en su música ) hasta
limites casi delirantes; una insaciable curiosidad por los mecanismos de
la pareja, de la vida conyugal, de los altibajos de la vida; una
generosidad absoluta para con los actores; un soberano clasicismo que le
permite asumir los riesgos más grandes. Tan inteligente como siempre,
PASCAL THOMAS, con mayor libertad que nunca, ha inventado una suerte de
comedia experimental inconfundiblemente francesa: excéntrica, impecable,
y absolutamente para todo el mundo.
Olivier Pére – crítico cinematográfico; programador de la Cinémathèque
Française y de la Quincena de Realizadores.
Han viajado por todo el mundo, viéndoselas con el peligro cara a cara.
Vinculados con los servicios secretos, y por ende con los secretos de
estado, toda una vida de aventuras les ha dejado su marca, forjando un
lazo indestructible entre ellos. Pero eso fue ya hace mucho tiempo.
Ahora, Belisaire (ANDRÉ DUSSOLLIER) se ha convertido en un cazador de
intrigas del terrorismo internacional. Y Prudence (CATHERINE FROT),
todavía sumamente activa, se planta violentamente en contra de todo
anquilosamiento, porque ya se sabe: no hacer nada estimula la
imaginación y conduce a ...seguir no haciendo nada.
Estos audaces expertos anti-crimen encarnan una relación con el peligro
siempre espirituosa y arrolladora. Su refinado dandismo, su sentido del
humor, su joie de vivre se combinan de maravillas con las obsesiones más
mórbidas y con el agudo cinismo de ÁGATHA CHRISTIE, dueña de una
imaginación y de una vida privada tan singulares, que han resultado ser
un misterio mucho más intrincado que el de cualquiera de sus libros.
Todo comienza en una lujosa Residencia para la Tercera Edad,
especializada en acoger ancianas muy ricas y muy excéntricas, donde la
tía de Belisaire, Ada Beresford (FRANÇOIS SEIGNER),evidencia una
senilidad que más bien parece malicioso humor negro, bajo un aspecto, y
un espíritu, asombrosamente saludables, sin saber, no obstante, que está
viviendo sus últimos días. Lejos de simpatizar con la anciana, Prudence
se siente mucho más inclinada a intimar con otra de las veteranas
residentes, Rose Evangelista (GENEVIÉVE BUJOLD), quien no cesa de hacer
alusiones constantes a tragedias olvidadas. Prudence también se siente
intrigada por un cuadro donde se ve una casona que ella cree haber visto
en sueños, o visitado en un nebuloso pasado. Cuando se entera de que
Rose Evangelista acaba de irse de la residencia de manera harto
inesperada, Prudence inmediatamente sospecha que hay gato encerrado. Y
no le lleva demasiado tiempo deducir que, detrás de este hecho que
podría ser banal, se mueve una mano criminal.
A partir de ese momento, y como es habitual en el laberíntico universo
de ÁGATHA CHRISTIE, aquí los héroes de turno deberán poner bajo la lupa
una miríada de pistas, evidencias y claves, legítimas y falsas; a saber:
una muñeca vestida de blanco, una viaje en tren que vuelve del pasado,
un órgano mecánico, un espejo encantado, una carta del más allá, dos
botellas de vino suizo que parecen de sangre, un coro angelical, dos
líneas de la letanía susurrada por las brujas de Macbeth, un ataque de
la mal llamada “amnesia nostálgica”, whisky barato, un puñado de
diamantes genuinos robados en Paris treinta años atrás, una casona
partida literalmente en dos, una puerta-trampa, una daga en el
inmaculado corazón de una Virgen María de porcelana, un vaso de leche
envenenada, y alguna que otra aparición sobrenatural.
Para Prudence, los suicidios y las muertes naturales no existen; solo se
trata de crímenes que han quedado impunes. Si le hablan de Emma Bovary,
para ella lo del suicidio de la infortunada infiel es puro cuento: ¿cómo
no sospechar del boticario?; y si el tema de conversación es Edipo, ella
estará siempre dispuesta a debatir la responsabilidad criminal del
susodicho. Prudence tiene un olfato agudísimo para detectar delitos, lo
cual genera en su esposo Belisaire una mezcla de admiración e inquietud.
Está dotada con una suerte de intuición fulminante, siempre inspirada en
lo que le dictan el momento y el lugar, lo cual la convierte en una
persona increíblemente perspicaz, y a veces un tanto alocada.
Aprovechando el misterio de la repentina desaparición de Madame Rose
para eludir la entrometida presencia de su hija Marie-Christine (SARAH
BIASIN), de su yerno Rudi (FRANÇOIS BETTENS) y de los dos hijos de
estos, Prudence se lanza a dar con la pista de la anciana que se ha
esfumado, a pesar de las advertencias de Belisaire. Su improvisada
pesquisa la embarca en un periplo por los Alpes franceses, donde gente
que habitualmente no tiene nada que decir de repente se descuelga con
historias terroríficas narradas en voz baja, y en tono de confesión
secreta, y donde los paisajes más idílicos y pacíficos ocultan crímenes
monstruosos, y dejan escuchar mezclado con el viento el eco del grito de
las víctimas.
En su búsqueda de Rose Evangelista, Prudence se cruza con una serie de
personajes muy extraños: Mrs Pacard (ELISABETH MAROCO), la ambigua
directora de la Residencia; Miss Aupic (ISABELLE GIAMI), la enfermera de
exuberante sensualidad y con un ojo sumamente agudo para inmiscuirse en
los guardarropas onerosos de sus vetustos pacientes; y los excéntricos
Perry: Amos (BERNARD MARCATTE) con su aspecto casi medieval, y Alice (ANNE
LE NY) con su sombrero de bruja. Prudence también tendrá tiempo para
toparse con un cura alcohólico (ANDRÉ THORENT) y con el extraño dueto
que conforman los dueños de la posada a donde irá a alojarse, los
hermanos Coupelays; ella (VALÉRIANE DE VILLENEUVE), una terrible
chismosa de lengua viperina, y él (MAURICE RISCH), un pintor amateur
convencido de que puede revivir a los muertos en sus frescos. También
andará por allí la insólita Miss Blayes (VALÉRIE KAPRISKY), una presunta
ingenua de anteojos que esconde sus anhelos absolutamente terrenales
detrás de un manto de apariencia angelical.
Poco a poco, Prudence empieza a convertirse en una obsesiva molestia
para quienes preferirían que ella no anduviera husmeando por ahí, y así
es como termina en el hospital, donde la encuentra Belisaire, quien ha
debido interrumpir el diseño estratégico de la defensa de toda Europa
para dedicarse a la misión, menos loable pero mucho más exigente, de
rescatar a su mujer. Pero Prudence insiste, con la certeza que la
resolución del enigma está muy próxima, pese a que el peligro de meterse
donde no debe sigue en aumento. Así, y con todavía más estrambóticos
individuos que aparecerán en su camino – un sinuoso abogado (LAURENT
TERZIEFF), de turbio pasado, y el Capitán Richard ( PIERRE LESCURE ), un
ex compañero de Belisaire en el Servicio Secreto ahora enrolado en la
más plácida policía de provincia - Prudence une sus fuerzas con
Belisaire para desenredar la madeja de un enigma que alguien quiere
mantener en secreto para siempre.
FILMOGRAFÍA PASCAL THOMAS
Cine
2001 DAY OFF (MERCREDI, FOLLE JOURNEE)
Vincent Lindon, Alessandra Martines, Catherine Frot, Victoria Lafaurie
1998 LA DILETTANTE
Catherine Frot, Barbara Schulz, Christian Morin, Marie-Christine
Barrault
1991 LA PAGAILLE
François Périer, Patrick Chesnais, Rémy Girard
1989 LES MARIS, LES FEMMES, LES AMANTS
Jean-François Stévenin, Susan Moncur, Daniel Ceccaldi, Catherine Jacob
1982 CELLES QU’ON N’A PAS EUES
Michel Aumont, Michel Galabru, Daniel Ceccaldi, Bernard Menez
1979 HEART TO HEART (CONFIDENCES POUR CONFIDENCES)
Daniel Ceccaldi, Henri Crémieux, Jacques François, Jacques Villeret
1977 PARLES-MOI D’ARGENT (Un oursin dans les poches)
Darry Cowl, Bernard Menez, Maurice Risch
1976 LA SURPRISE DU CHEF
Annie Colé, Virgine Thévenet
1974 THE HOT RABBIT (LE CHAUD LAPIN)
Claude Barrois, Daniel Ceccaldi,
1973 DON’T CRY WITH YOUR MOUTH FULL (PLEURE PAS LA BOUCHE PLEINE)
Bernard Menez, Jean Carmet, Daniel Ceccaldi
1972 LES ZOZOS
Frédéric Duru, Virgine Thévenet,
1971 LE POEME DE L’ELEVE MIKOVSKY
Telefilms
1991 PORTRAIT DE DOUGLAS SIRK (documental)
1991 PORTAIT DE VINCENT PRICE (documental)
1982 LA FABRIQUE de Marcel Aymé
1982 UN COUP DE RASOIR de Eugène Labiche
Una
Coproducción AH ! VICTORIA ! FILMS / FRANCE 2 CINEMA / RHONE-ALPES
CINEMA con la participación de CANAL+ / FRANCE 2 / CINECINEMA /
CENTRE NATIONAL DE LA CINEMATOGRAPHIE en asociación con SOFICA
SOFICINEMA – Un Film de PASCAL THOMAS « LA DESAPARICIÒN DE MADAME
ROSE » (MON PETIT DOIGT M’A DIT) – Origen: FRANCIA – duración: 105
minutos – Guión y diálogos de FRANÇOIS CAVIGLIOLI, NATHALIE LAFAURIE
& PASCAL THOMAS basados en la novela de AGATHA CHRISTIE « By the
Pricking of my Thumbs » - Música Original : REINHARDT WAGNER –
Fotografía : RENAN POLLES – Diseño de Producción : KATIA WYSZKOP –
Montaje : CATHERINE DUBEAU – Vestuario : MAUD MOLYNEUX – Asistentes
del Director : MARIE DE LA SELLE – OLIVIER HORLAIT – Productor
Asociado : NATHALIE LAFAURIE – Productor Ejecutivo : OLIVIER HORLAIT
- Producida por ALAIN CADIER – PASCAL THOMAS – Dirigida por PASCAL
THOMAS
ELENCO
Catherine FROT Prudence BERESFORD
André DUSSOLLIER Bélisaire BERESFORD
Geneviève BUJOLD Rose EVANGELISTA
Laurent TERZIEFF ANET
Valérie KAPRISKY Miss BLAYES
Bernard VERLEY El General
Alexandra STEWART Miss BOSCOVAN
Sarah BIASINI Marie-Christine
François BETTENS Rudi
Françoise SEIGNER Tía ADA
Elisabeth MACOCCO Miss PACARD
Isabelle GIAMI Miss AUPIC
Hervé PIERRE Doctor MAUROY
André THORENT El Cura
Anne LE NY Alice PERRY
Bernard MARCATE Amos PERRY
Maurice RISCH Mr COUPELAY
Valériane DE VILLENEUVE Miss COUPELAY
Pierre LESCURE Inspector RICHARD
Alexandre LAFAURIE MAUGENDRE
Elena MANSO La Enfermera
Paul MINTHE Empleado del parking
Gérard CHAILLOU Profesor
Héloïse WAGNER Enfermera
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