Título Original: Seed of Chucky

SINOPSIS


Chucky vuelve a la pantalla!

Quasar Films presentó el 3 de febrero El hijo de Chucky, quinto largometraje con el famoso personaje. Luego de Chucky, el muñeco diabólico (Child´s Play, 1988, dirección de Tom Holland), Chucky, el muñeco diabólico 2 (Child´s Play 2, 1990, de John Lafia), Chucky, el muñeco diabólico 3 (Child´s Play 3, 1991, de Jack Bender) y La novia de Chucky (Bride of Chucky, 1998, de Ronny Yu), esta nueva entrega fue escrita y dirigida por Don Mancini, guionista de toda la serie.


 

Los productores son nuevamente David Kirschner (creador de los muñecos) y Corey Sienega; y la música, que incluye además diversas canciones, es de Pino Donaggio, compositor de Vestida para matar, El sonido de la muerte y, entre otras, Aullidos, y un distinguido colaborador de Brian De Palma y Dario Argento.


 

Acentuando más que ninguna de sus antecesoras los costados de humor negros latentes o explícitos en la idea, El hijo de Chucky busca el sobresalto tanto como la carcajada.

LA TRAMA

Prisionero de un ventrílocuo que lo explota en un infame espectáculo londinense, el muñeco Glen cree descubrir en un documental que ve por televisión su verdadero origen. Así se entera que en Estados Unidos están filmando Chucky Goes Psycho (Chucky se vuelve psicópata) y entonces se las ingenia para escapar rumbo a Los Angeles. Conseguirá, con toques de vudú, por pura magia o por las necesidades del cine, revivir a Chucky y a Tiffany, esa siniestra pareja. e introducirse en la existencia de Jennifer Tilly, aquí actriz y personaje, de alguna manera repitiendo el papel que hizo en La novia de Chucky. Tilly está interesada en conocer a Redman, que por entonces está produciendo un filme sobre la Virgen María, que la intérprete cree sería ideal para ella.

Pero como Chucky ni Tiffany han abandonado sus letales malas costumbres, será inevitable que la pila de víctimas empiece a crecer. Y ello con las infinitas habilidades que el dúo ha desarrollado a lo largo de su maléfica trayectoria.

GUIÑOS Y ALUSIONES

Indudablemente uno de los mayores placeres de los aficionados al cine (además de las películas en su conjunto) sea encontrar en cada una los guiños que se les arrojan desde la pantalla. Y que ciertamente despiertan en ellos un curioso espíritu de competencia, aquél de poder descubrir en el parpadeo de la imagen claves y referencias.


 

En tal sentido, El hijo de Chucky es de una indiscutible generosidad, empezando por un detalle que el relato no explica y que son las bromas referidas a la gordura (supuesta) de Jennifer Tilly, dueña de un cuerpo curvilíneo y atrayente. Pero como por exigencias del papel debía perder unos kilos (y no sabiendo si lo lograría esta mujer saludable y de buen apetito), el guionista-director Mancini incluyó chistes alusivos.


 

Que al muñeco joven su padre lo llame Glen y su madre Glenda, refiere inicialmente a las dudas que sobre su propio género tiene el personaje. Que Chucky quería que fuese varón y Tiffany niña. Pero también apunta a ¿Glen o Glenda?, la más conocida película sobre el tema y fruto de los delirios de Ed Wood, catatalogado como el peor director en la historia del cine.


 

Y hay, además, sobre esto, otra decepción: Chucky soñaba con que su hijo siguiera sus pasos, pero en lugar de asesino serial le salió un convencido pacifista. Son las cosas que a menudo frustran el sano sentido de la paternidad.

Por su parte, como el reportero amarillista Pete Peters aparece nada menos que John Waters, el director de películas de culto como Pink Flamingos, Cry Baby, Hairspray o Cecil B. Demented. Un confeso admirador de Chucky (admite que el muñeco respectivo es una preciada posesión) y su destino en el filme –no se dirá cuál– tiene mucho que ver con el que sufriera alguno de sus actores en una de sus obras.

El hijo de Chucky, además de las alusiones, ofrece referencias expresas a varios títulos notables, como por ejemplo El resplandor, El bebé de Rosemary, Halloween y hasta Erin Brockovich... Jennifer Tilly (¿la actriz de la realidad o aquélla de la ficción?) dice detestar y probablemente envidiar a Julia Roberts: “Yo hubiera hecho mucho mejor el papel de Erin y sin necesidad de corpiños especiales”... son algunos de los mordaces comentarios que aparecen en el film.

COMENTARIOS DE LA CRÍTICA:

Revista Rolling Stone:

"Lejos del horror con toques cómicos de la primeras tres entregas, El hijo de Chucky -como sucedía con La novia de Chucky hace unos años- se instala en la comedia franca y desembozada. (...) Algo es seguro: si el espectador tiene buenas referencias acerca de la primera historia previa de los personajes y alguna información sobre el gossip holywoodense, podrá apreciar las abundantes citas (casi siempre paródicas) y disfrutará a pleno".

Revista Inrockuptibles, por Javier Diz:

"En esta cuarta entrega, Don Manzini escribe y dirige a los personaje que él mismo renovó en La novia... en una continuación directa de aquélla, pero esta vez deja de lado casi completamente el terror y construye la película alrededor de un humor sarcástico y por momentos inquietante, algo difícil de lograr en tiempos en los que cualquiera cree poder provocar. Mancini utiliza sus muñecos para plasmar una visión paródica de la sociedad norteamericana, más precisamente de la industria que le da de comer (el film está cargado de chistes y comentarios sobre Julia Roberts, Mel Gibson, Britney Spears, la televisión y la propia Jennifer Tilly, una verdadera scream queen, que aquí hace de sí misma). (...) Después de El hijo de Chucky y Team America -el film de Trey Parker (South Park), aún inédito-, habrá que darles crédito: la revolución está en las manos de unos cuantos muñecos".

 

ACERCA DEL DIRECTOR

Don Mancini

Graduado como cineasta de la UCLA, Mancini se inició como guionista cuando en sus épocas de estudiante decidió escribir una historia llamada “Child’s play”, la cual tiempo después sería por muchos conocida como “Chucky, el muñeco diabólico”.

La historia de un muñeco infernal basado en los conocidos Cabbage Match, pronto tomó auge en la audiencia de la década del ochenta, permitiendo que Mancini dejara todo para convertirse en creador de otras cuatro secuelas incluyendo “El hijo de Chucky” (Seed of Chucky).

Y aunque en su filmografía puede apreciarse la película “Cellar dweller” (1988), así como su participación dentro de la serie “Cuentos desde la cripta” (Tales from the crypt), su éxito siempre ha radicado en el muñeco diabólico que ahora revive en las pantallas cinematográficas.

Ahora, tras dieciséis años de haberse estrenado la primer película de Chucky, y después de que Mancini trabajó con cuatro directores distintos para cada una de sus películas (Child’s play: Tom Holland; Child’s play: John Lafia; Child’s play 3: Jack Bender; y Bride of Chucky: Ronny Yu), el conocido guionista decide dirigir esta quinta parte de la saga en la que ahora toma vida el hijo de un personaje que lo llevó a la fama hace ya muchos años.

ACERCA DEL ELENCO

Brad Dourif

Bradford Claude Dourif, nacido el 18 de marzo de 1950 en Virginia, Estados Unidos, comenzó a destacarse en la escuela de Airen donde era habitué del club artístico. En simultáneo ejerció como profesor de arte y dirección de la Universidad de Columbia, actuando también durante tres años en la Circle Repertory Company de Nueva York.

La experiencia de Dourif viene principalmente del teatro, donde representó obras como “The ghost sonata” y “The doctor in the spite of himself”, sin embargo, el verdadero reconocimiento de este actor vino con su papel al lado de Jack Nicholson en el film “Alguién voló sobre el nido del cucú”, por el cual  obtuvo el Globo de Oro, una nominación al Oscar, y el premio al mejor actor de la academia británica.

Uno de sus últimos trabajos fue dentro de la trilogía de “El señor de los anillos”.

Jennifer Tilly

Iniciada en 1983 en la serie televisiva “Boone”, la actriz originaria de California, Estados Unidos, inició su carrera en la pantalla grande en 1984 con la película “No small affair” al lado de Demi Moore. Y aunque su especialidad siempre se ha encontrado en el conocido cine gore, así como en producciones independientes, Tilly se ha destacado en grandes producciones como “Bullets over Broadway” (1994), la cual le valió una nominación al premio de la Academia, así como el film “Liar liar” (1997), por la que fue nominada al Blockbuster Award.

Para 1998, Jennifer Tilly se convirtió en el ícono del terror con “La novia de Chucky” (The bride of Chucky), película en la cual dio vida con su voz a la pareja del muñeco diabólico, dando un sorprendente giro a la historia que comenzó años atrás.

Recientemente fue vista en la pantalla grande como parte del elenco de la película “La mansión embrujada” (The haunted mansion”).

Billy Boid

De origen escocés, Billy Boyd inició su carrera dentro de la televisión de su país, en el show “Taggart” (1996), el cual le abrió nuevas puertas en ese mismo medio hasta que le llegó la oportunidad de insertarse en la pantalla grande dos años más tarde con la película “Urban ghost story”.

Y aunque su llegada al cine no es para muchos recordada, sí es mucho más fácil ubicarlo por su papel del hobbit Pippin en la trilogía de “El señor de los anillos” (The lord of the rings).

Ha participado en varias producciones teatrales como por ejemplo “Trainspotting”.